Por que de estos temas depende no solo la administración federal, sino la economía de todos los mexicanos
El primer año de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador estará marcado por un entorno global menos claro y un ambiente mexicano deteriorado.
La firma de gestión de activos Franklin Templeton contempla tres escenarios para el país: el positivo, con una posibilidad de apenas 20 por ciento de cumplirse; así como uno negativo y uno medio, cada uno con 40 por ciento de volverse realidad.
Dentro del escenario negativo, señaló la firma, destaca que el tratado T-MEC fracasa en el Congreso y regresan las amenazas de terminarlo. Asimismo, se detiene la expansión económica en Estados Unidos; mientras que las guerras comerciales afectan el entorno global.
“Los mercados emergentes podrían registrar una crisis generalizada que provoque contagio en el bloque. En México, el nuevo gobierno es disfuncional y con un gasto desordenado”, alertó Franklin Templeton en uno de sus escenarios.
Por otra parte, en el escenario medio, el T-MEC se aprueba con atraso y adecuaciones. Mientras que la política monetaria es correcta, pero incierta. En Europa, China, Rusia, Corea y Medio Oriente, los riesgos se materializan parcialmente y la crisis en países emergentes sólo contagia a los más vulnerables.
AMENAZAS EXTERNAS
De acuerdo con Vanguard y Natixis, los riesgos que se enfrentarán este 2019 están a cargo de Estados Unidos, que podría desacelerar su expansión económica y su política monetaria incierta; en medio de guerras comerciales, así como crisis en los países más vulnerables.
Vanguard detalló que aumenta la inquietud de una inminente recesión, a medida que la economía global inicia su décimo año de expansión y se espera que la economía mundial continúe creciendo en los próximos dos años, aunque a un ritmo más lento.
“Las tensiones comerciales no resueltas entre EU y China continúan siendo el factor de riesgo más grande que hay, seguido por un ajuste de la Reserva Federal más fuerte de lo esperado en caso de que la tasa de desempleo estadounidense se acerque más al 3.0 por ciento”, señaló Vanguard.
