El ajuste, publicado la noche del viernes 31 de octubre en una edición Bis de la Gaceta Oficial capitalina, aplica a rutas, microbuses, vagonetas y corredores, pero no incluye al Metro, Metrobús, Tren Ligero ni Trolebús.
El acuerdo fue firmado por la jefa de Gobierno, Clara Brugada, junto con los secretarios de Gobierno y Movilidad, César Cravioto y Héctor Ulises García, respectivamente. En el documento se establece que las nuevas tarifas entrarían en vigor al día siguiente de su publicación, es decir, desde este sábado.
A partir de este sábado 1 de noviembre, los usuarios del transporte público concesionado en la Ciudad de México comenzaron a pagar un peso con cincuenta centavos más por viaje.
De acuerdo con la actualización, los costos quedaron de la siguiente forma:
Microbuses y vagonetas: 7.50 pesos por los primeros 5 kilómetros; 8.00 pesos de 5 a 12 kilómetros, y 9.00 pesos para trayectos mayores a 12 kilómetros.
Autobuses de ruta: 8.50 pesos hasta 12 kilómetros y 9.50 pesos en recorridos más largos.
Corredores concesionados: 9.50 pesos por viaje.
En todos los casos, el horario nocturno —de 23:00 a 6:00 horas— tendrá un incremento adicional del 20% sobre la tarifa regular.
Las condiciones del aumento
El ajuste tarifario fue resultado de más de cinco horas de negociación entre autoridades y representantes de la Fuerza Amplia de Transportistas (FAT), quienes inicialmente exigían un aumento de dos pesos y un subsidio al combustible.
Aunque no obtuvieron ese apoyo, acordaron con el gobierno capitalino un programa de sustitución de unidades chatarra, con incentivos de hasta 450 mil pesos por vehículo renovado.
Además, las autoridades condicionaron el incremento a una serie de medidas de seguridad, mantenimiento y calidad del servicio. Entre ellas, los transportistas deberán:
- Contar con licencia tipo ‘C’ vigente y visible.
- Mantener activo su seguro de responsabilidad civil.
- Retirar vidrios polarizados.
- Revisar luces, frenos, puertas, llantas y pasamanos.
- Garantizar el funcionamiento de cámaras, botones de auxilio y GPS.
- Los conductores, por su parte, deberán portar uniforme (pantalón oscuro y camisa blanca), mantener limpias las unidades y participar en programas de capacitación obligatoria.
Supervisión y próximos acuerdos
El gobierno capitalino advirtió que vigilará el cumplimiento de los compromisos adquiridos por los concesionarios, tanto en materia de mantenimiento como en la atención al usuario.
En los próximos meses se prevén nuevas mesas de negociación para analizar otros incentivos y mecanismos de mejora del servicio.
Con este aumento, la CDMX registra su primer ajuste tarifario al transporte concesionado desde 2022, en medio de un contexto de inflación, alzas en el combustible y exigencias del sector por modernizar sus unidades.



