¿Cómo fue el Operativo Rápido y Furioso que trajo armas de EU a México?

Con esta operación, entre 2009 y 2011 Estados Unidos ingresó armas ilegales a México.
Con esta operación, entre 2009 y 2011 Estados Unidos ingresó armas ilegales a México.
Rápido y Furioso.Con esta operación, entre 2009 y 2011 Estados Unidos ingresó armas ilegales a México.
Especial
Nación321
2022-01-10 |17:16 Hrs.Actualización09:26 Hrs.

El caso tiene más de 10 años de historia, sin embargo, se reavivó luego de que un juez dictó órdenes de aprehensión contra posibles implicados en el Operativo Rápido y Furioso, que entre 2009 y 2011 ingresó armas de Estados Unidos a México y que fueron usadas por el crimen organizado.

Además de los constantes señalamientos del presidente Andrés Manuel López Obrador en contra de Felipe Calderón, quien autorizó la operación bilateral que buscada disminuir el tráfico de armas en México y Estados Unidos. 

Entre quienes están llamados por la Fiscalía General de la República (FGR) está Joaquín “El Chapo” Guzmán, el exsecretario de Seguridad, Genaro García Luna, y el exdirector de Seguridad Regional de la Policía Federal, Luis Cárdenas Palomino, además de otras cuatro personas.

De acuerdo con la fiscalía mexicana, el operativo fallido era de naturaleza “ilegal e inadmisible”. Además, se anunció que conforme a las investigaciones desarrolladas por el Departamento de Justicia de EEUU, se obtuvo la información necesaria para “establecer dicho tráfico ilegal de armas de fuego, que fueron utilizadas en diversos delitos de sangre en el país, desde al año de 2009 hasta fechas recientes”.

¿EN QUÉ CONSISTIÓ LA OPERACIÓN "RÁPIDO Y FURIOSO"?

El objetivo era frenar el crimen organizado en México durante el sexenio del presidente Felipe Calderón, su declarada “guerra contra el narco” y la Iniciativa Mérida como un acuerdo con Estados Unidos en temas de seguridad.

Aunque las negociaciones iniciaron en 2007 entre Calderón y el presidente de EU, George Bush, fue hasta el 2009 que se lanzó la operación “Rápido y Furioso” con un presupuesto millonario aprobado por el Congreso norteamericano.

La operación fue lanzada por la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés) y consistía en el ingreso de miles de armas a México para venderlas a presuntos miembros del crimen y traficantes, sin embargo, todas ellas contarían con un chip para ser rastreadas, darle seguimiento al armamento y llegar a los narcotraficantes mexicanos.

Dicho plan facilitó que fueran compradas ilegalmente 2 mil 500 armas; sin embargo, todo se develó como un fracaso cuando una de ellas asesinó al agente fronterizo Brian Terry, en un tiroteo en Arizona.

Un año después, en febrero de 2011, también fue asesinado el agente de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE), Jaime Zapata y su compañero, Víctor Ávila, resultó gravemente herido. El ataque ocurrió con las armas infiltradas.

De acuerdo información de la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO), el Cártel de Sinaloa, dirigido por Joaquín ‘El Chapo Guzmán’, habría sido el principal beneficiario del operativo fallido.

Aún se desconoce el número exacto de las armas que ingresaron al país, así como las víctimas derivadas de la operación.

SE ENFRENTAN AMBOS GOBIERNOS

Los hechos causaron un desencuentro entre el gobierno de Calderón y el de Barack Obama, quien ya se encontraba en el gobierno. El presidente mexicano reclamó a Washington sobre la ejecución de la operación e incluso hubo enfrentamientos diplomáticos por la transparencia del operativo.

En 2012, Janet Napolitano, exsecretaria de Seguridad Interna, aceptó que se cometieron errores en la operación; mientras que en 2016, el Departamento de Justicia confirmó que la operación fue “supervisada de manera irresponsable”.

Sobre el caso, el presidente, Andrés Manuel López Obrador, y el canciller, Marcelo Ebrard, enviaron una nota diplomática al exmandatario, Donald Trump, para el esclarecimiento del operativo.

E incluso se eliminó la relación bilateral conocida como Iniciativa Mérida y se convirtió en el Entendimiento Bicentenario.

Asimismo, actualmente México está demandando a los fabricantes de armas en Estados Unidos, dicho proceso tendrá sus primeros avances durante este enero de 2022.