Desde 2020, más de 13 mil mexicanos desplazados por la violencia

Decenas de michoacanos llegan a Tijuana huyendo de la violencia en sus comunidades
Decenas de michoacanos llegan a Tijuana huyendo de la violencia en sus comunidades
Desplazados.Decenas de michoacanos llegan a Tijuana huyendo de la violencia en sus comunidades
Cuartoscuro
Eduardo Ortega
2021-07-08 |07:02 Hrs.Actualización07:02 Hrs.

La violencia en México no sólo deja víctimas mortales, sino también miles de personas que cada año tienen que desplazarse de sus lugares de residencia.

De acuerdo con la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH), en 2020 y lo que va de 2021, al menos 13 mil 246 personas han sido desplazadas.

El desplazamiento interno forzado es una violación de derechos humanos que se presenta cuando las personas se ven obligadas a huir de su hogar o lugar de residencia habitual como consecuencia o para evitar los efectos de una situación de violencia generalizada, de un conflicto armado o de violaciones a los derechos humanos, entre otras causas.

Datos de la CMDPDH, revelan que, en 2020, más de 9 mil 700 personas fueron desplazadas por la violencia en México; este año se han podido documentar 3 mil 546 casos.

Lígia de Aquino Barbosa Magalhães, investigadora del área de desplazamiento interno forzado de la CMDPDH, puntualiza que entre enero y mayo se han registrado tres eventos de desplazamiento masivo en Michoacán; dos en Jalisco, Chiapas y Guerrero, y uno en Oaxaca y Tamaulipas.

Refiere, en entrevista, que desde 2016, Michoacán ha registrado una escalada de la violencia y ha aumentado el número de eventos masivos de desplazamiento; por ejemplo, Barbosa Magalhães indica que, en el municipio de Aguililla, desde 2018, cada año hay al menos un nuevo desplazamiento masivo.

En Jalisco no es la primera vez que se reportan eventos de esta índole, pero desde hace unos años han sido cada vez más frecuentes las balaceras y los hechos de violencia por la disputa entre distintos cárteles, lo cual ha propiciado que este año, de enero a mayo, se hayan registrado dos episodios.

“Muchos de los eventos de desplazamientos de Michoacán, por ejemplo, son en esta región que colinda con Jalisco. Sabemos que este contexto de violencia está muy activo actualmente y eso genera desplazamientos en ambas entidades”, agrega.

Añade, por otra parte, que Chiapas es “un foco rojo” también, porque, desde 2017, en el municipio de Aldama se ha observado que casi un tercio de la población está en situación de desplazamiento, porque constantemente se reportan ataques armados de grupos  paramilitares.

"Allí hay una situación que no habíamos observado en otro lugar: que la población se encuentra en una situación de desplazamiento medio intermitente, y es que vuelven a sus casas cuando bajan las balaceras y los ataques, pero luego empiezan nuevamente y tienen que huir a las montañas y otros lados; luego, cuando disminuyen las balaceras, vuelven, pero están en constante desplazamiento”, explica.

Lígia de Aquino detalla que en Guerrero y Oaxaca llevan varios años que se han registrado desplazamientos, mientras que, en Tamaulipas, a pesar de que hay muchos eventos de violencia, no se reportan los desplazamientos con la misma frecuencia, lo cual puede ser porque no se cubre el tema o puede ser que los eventos no sean masivos.

Las cifras de desplazamiento de la CMDPDH son preliminares, ya que pueden sufrir cambios tras el surgimiento de información nueva y del análisis detallado que se realizará para la elaboración del informe anual definitivo.

En 2019, el Estado mexicano reconoció oficialmente la existencia del fenómeno en el país y se comprometió a atenderlo; sin embargo, aún no existe un marco normativo a nivel federal que determine la distribución de recursos y responsabilidades de los tres niveles de gobierno.