Abigael González Valencia, alias El Cuini, identificado por las autoridades como “el cerebro empresarial” del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), compareció por primera vez en la Corte del Distrito de Columbia, donde la jueza Beryl Howell celebró la audiencia inicial del proceso en su contra.
El capo de 61 años, quien durante una década libró su extradición desde México tras ser detenido en Puerto Vallarta en 2015, fue entregado a la justicia estadounidense el pasado 13 de agosto junto con otros 25 narcotraficantes.
El gobierno de Estados Unidos había recibido en febrero a un primer bloque de 29 reos, con el compromiso de que no solicitaría la pena de muerte para ninguno de ellos.
Durante la sesión, que apenas duró quince minutos y comenzó a las 9:30 horas, la fiscal Andrea Goldbarg informó que ya fueron presentadas las primeras pruebas: más de 76 mil documentos y múltiples grabaciones que incluyen interceptaciones de comunicaciones en dispositivos Blackberry en las que aparecen El Cuini, su cuñado Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, y Rubén Oseguera, El Menchito.
El acusado, vestido con uniforme naranja y con cadenas en manos y pies, ingresó a la sala por la misma puerta que fiscales y abogados debido a una falla en los elevadores internos de la prisión. Durante el receso, conversó brevemente con su abogado Robert Feitl, a quien dijo que padece hipertensión y que tenía pendiente una cirugía en México.
A González Valencia se le imputan tres cargos: crimen organizado, tráfico de cocaína y metanfetamina, y uso de armas de fuego. Aunque no enfrenta acusaciones de lavado de dinero, las autoridades estadounidenses sostienen que diseñó un esquema financiero que permitió al CJNG expandirse hacia Estados Unidos y Europa, donde la venta de cocaína alcanzó valores millonarios.
Figura clave en la estructura criminal, El Cuini encabezó la célula de Los Cuinis, encargada de financiar al cártel, lo que lo convirtió en pieza esencial para el crecimiento internacional de la organización.
La próxima audiencia fue fijada para el 24 de octubre, fecha en que la fiscalía solicitará que el caso sea considerado “complejo” para ampliar los plazos de presentación de pruebas y preparación de la defensa.
