Juan Ignacio Zavala: La candidata profesional

El domingo vimos a una candidata profesional, bien asesorada y con herramientas hechas para ella
El domingo vimos a una candidata profesional, bien asesorada y con herramientas hechas para ella
Una Xóchitl seria.El domingo vimos a una candidata profesional, bien asesorada y con herramientas hechas para ella
Cuartoscuro
autor
Juan Ignacio Zavala
Consultor en comunicación
2024-01-17 |06:04 Hrs.Actualización06:04 Hrs.

El domingo terminaron las precampañas. Xóchitl Gálvez cerró con un evento notable que dejó ver los cambios profundos que ha llevado en su campaña. Se trató de algo muy bien armado. Un lugar cerrado, con buena capacidad sin tratarse de un estadio. Llenar estadios es algo del pasado y no tiene sentido. Un evento cerrado permite centrar la atención en el personaje. Por supuesto, para lograr tener la atención es importante contar con un mensaje llamativo, que emocione y que genere nota para redes y medios. Y Xóchitl lo tuvo. 

En materia de organización fue claro que se minimizaron los errores y si hubo alguno no se notó. Se le dio la palabra a quien la debería de tener: la candidata. Los líderes partidistas fueron minimizados, como debe ser, y no hubo nada que desviara la atención sobre la candidata. Sin duda una novedad. Se trató de un evento rigurosamente profesional en todas sus partes, en el que no hubo nada sujeto a la improvisación o a la buena fe de familiares o amigos. 

Sin lugar a dudas la pieza central del cambio en Xóchitl y del éxito en el evento fue el discurso. Tenía tiempo que no se comentaba tanto un discurso opositor en redes y en medios. Se trata de una pieza bien lograda, no solamente en términos conceptuales, de foco de campaña y de crítica, sino también como arenga y grito de batalla al identificar con precisión a sus adversarios. Algo completo en términos discursivos y campañeros. Es claro que llamó la atención no solamente de los asistentes, sino también de opinadores y analistas. 

Muchos comentan que se trató de un regreso a la Xóchitl “de antes”. No estoy de acuerdo. Me parece que precisamente lo que se corrigió, sin quitarle identidad, fue a la Xóchitl “de antes”. La Xóchitl “al natural”, “la de antes” es lo que habíamos visto hasta el domingo: llena de ocurrencias, de risa constante, desestructurada, proclive al chistín y al comentario vulgaroide. El domingo vimos a una candidata profesional, bien asesorada, seria, con herramientas hechas para ella y que supo proyectar como propias. Eso es lo que tiene que hacer alguien que busca la Presidencia de su país. 

Xóchitl dejó claro que su contendiente es Claudia Sheinbaum, a quien retó y fustigó por ofrecer la continuidad y la describió como alguien carente de voluntad. También criticó a López Obrador con su presidencia autoritaria y mencionó claramente tres puntos para defender en su campaña y como ejes de la misma: la defensa de la verdad, de la vida y de la libertad, todas ellas devaluadas durante el lopezobradorato.

La propia Xóchitl ha de ver el resultado de haber realizado cambios serios y ponerse con profesionales, más allá de filias y fobias, y entender que lo natural no va peleado con la técnica, que la intuición es útil pero que la preparación y la disciplina son indispensables.

No sabemos si el éxito de su evento fue flor de un día. Pero parece que Xóchitl y su equipo están dispuestos a cambiar (podrían hacer algo con esa ridícula frase de “fuerza y corazón por México”, que además de cursi no dice nada) a fondo y ya vieron los resultados. De su desempeño en los próximos días veremos si hay más de esta nueva Xóchitl.