Moneda en el Aire

La reforma a la jornada laboral, ¿una iniciativa en el limbo?

La reforma a la Jornada Laboral requiere mucho más que promesas, ya que es el sector empresarial el que tiene mucho que decir sobre el tema.

Declaraciones van y vienen, fechas y promesas, lo cierto es que el avance hasta ahora va ¿lento? depende del cristal con que se mire, lo cierto es que la reforma a la Jornada Laboral, requiere mucho más que promesas, ya que es el sector empresarial el que tiene mucho que decir sobre el tema.

Marath Baruch Bolaños (Especial)

Mucho se había especulado que la iniciativa sobre la reforma constitucional que contempla la reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales, se presentaría el pasado 20 de noviembre, partiendo del hecho de que la 4T gusta empalmar sus propuestas con efemérides patrias y el aniversario de la Revolución Mexicana era la última de estas en el año.

Pero el anuncio no llegó, no hubo iniciativa, no hubo mensaje político, no hubo hoja de ruta. Solo silencio, y en política, este suele comunicar muchas cosas. Sobre todo, cuando se había creado la expectativa –desde adentro y afuera del Congreso– de que ese día marcaría un punto de inflexión en la agenda laboral del país y no sucedió.


Eso sí, la narrativa oficial insistió durante semanas que el dictamen estaba ya maduro; legisladores de las diferentes comisiones reconocieron, por lo bajo, que a pesar de las coincidencias, lo cierto es que no existía un acuerdo sobre la forma de aplicarla, esto pese al trabajo que vienen realizando diversas secretarías, desde luego encabezadas por la del Trabajo que lleva Marath Baruch Bolaños López.

Durante meses, el sector privado ha insistido en que la reducción de la jornada incrementaría los costos laborales hasta en un 15 por ciento, el mismo jueves, el día “D”, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) solicitaba aprobar sin prisas la reforma; que las modificaciones se hicieran con base en el análisis y sin afectar la viabilidad de las empresas, a lo que al parecer el Gobierno Federal cedió, lo que originó este fin de semana marchas y protestas por parte de los trabajadores, pidiendo que la propuesta avance, como se ha dicho.

Y es que una transición mal diseñada podría frenar las contrataciones y complicar la operación de sectores que dependen de turnos continuos en el sector empresarial, por lo que todo indica la decisión de no presentar la iniciativa de reforma representó no solo un acto de sensibilidad de la autoridad, sino un reconocimiento de que sin una ruta de implementación bien definida –por sectores, por tamaño de empresa o por gradualidad–, la iniciativa hubiera surgido entre cuestionamientos y cálculos incompletos, llevando inevitablemente a una confrontación política, peor aún, en problemas para las empresas.

La mayor preocupación se encuentra en las Pymes, un sector que constituye el 99.8 por ciento del total de empresas y genera el 72 por ciento del empleo formal, son negocios que, en su mayoría operan con márgenes mínimos y con equipos reducidos. Una disminución de la jornada sin ajustes salariales podría elevar el costo por hora trabajada hasta un 20 por ciento, un aumento que muchas empresas simplemente no podrían soportar sin recurrir a despidos, recortes de turnos o, en el peor de los casos, migrar hacia la informalidad.

Sin un esquema de puesta en práctica gradual o diferenciado, la reforma corre el riesgo de ser políticamente noble, pero regresiva en su efecto, porque terminaría castigando precisamente a los pequeños negocios y a los trabajadores que pretende proteger, profundizando las brechas en lugar de cerrarlas.

Eso sí, si nos dejamos llevar por las fechas, tendría que aprobarse antes de que finalice el actual periodo ordinario de sesiones –el 15 de diciembre- de otra manera no podrá dar inicio el primero de mayo, otra fecha emblemática en el calendario, aunque si existe la sensatez, dejar fechas y legislar con inteligencia debería ser el camino. Ya veremos.

México, líder en Cumbre de Líderes del G20

Edgar Amador (Especial)

La asistencia de México este 22 y 23 de noviembre a la Cumbre de Líderes del G20 en Sudáfrica no fue menor, y es que el secretario de Hacienda, Edgar Amador representante del gobierno de México, reafirmó el compromiso del país con una política económica humanista, incluyente y sostenible.

El secretario estuvo acompañado por un equipo clave, que incluyó a la subsecretaria de Relaciones Exteriores, María Teresa Mercado; la embajadora de México en Sudáfrica, Sara Valdés Bolaño, y la directora general de Planeación Política y G20, Catalina López Portillo Alcocer.

Como jefe de delegación aprovechó el viaje para sostener reuniones 1:1 con ministros de España y representantes de la Comunidad Europea para tratar temas relevantes de coordinación económico-financiera, pero sin dejar de lado la igualdad de género y desarrollo sostenible, agenda que desarrolló durante la Cuarta Reunión de líderes MIKTA que integran México, Indonesia, Corea, Turquía y Australia.

También sostuvo reuniones bilaterales con los ministros de finanzas de Irlanda, Alemania y Brasil, con quien las coincidencias fueron muy provechosas,

La belleza con Mastercard

Mauricio Schwartzmann (Especial)

En México, según las asociaciones locales de estilistas, existen aproximadamente 350 mil salones de belleza y que son generadoras de empleo y fomentan el emprendimiento, pero también constituyen un centro de alto manejo de efectivo y es ahí, en donde han puesto el ojo diversas empresas financieras, como Mastercard que en nuestro país lleva Mauricio Schwartzmann.

En los salones de belleza hay una larga dependencia del efectivo, lo que aumenta el riesgo de fraude y amplía la brecha digital, lo que limita el acceso de los profesionales de la belleza a servicios financieros seguros; la brecha digital representa un obstáculo para muchos pequeños comerciantes en América Latina y el Caribe, donde el 90 por ciento de los pagos B2B todavía se realizan en efectivo, cheques y transferencias bancarias, y eso es lo que buscan cambiar de la mano de la empresa de belleza L’Oréal.

Por lo que interesante es la alianza entre Mastercard, L’Oréal y la Fintech Clara, ya que tendrán un producto específico para la industria de la belleza, en especial para los propietarios de salones de belleza, estilistas independientes, creadores de contenido de belleza y distribuidores dentro de la red profesional de L’Oréal en México.

También se planea la expansión a otros mercados de América Latina y el Caribe con socios financieros adicionales, pero por lo pronto será México la punta de lanza, si el modelo funciona, no descarta que serán otros segmentos en donde se vean trabajos similares.

Mara Lezama, la próxima anfitriona de los banqueros

Mara Lezama Mara Lezama (Especial)

Será Cancún, Quintana Roo que gobierna Mara Lezama, la próxima sede de la convención bancaria que organiza la Asociación de Bancos de México (ABM), ganando a otras entidades y a Guerrero, que por lo pronto no verá nuevamente el regreso de ese evento.

La próxima convención de los banqueros será del 18 al 20 de marzo en el Hotel Ava Resort Cancún, en donde ya hasta lo visitaron para cerciorarse que reúne todas las condiciones de un encuentro de ese tipo realizaron.

El presidente de la ABM, Emilio Romano, adelantó que el próximo año los temas estarán enfocados en profundizar sobre los 4 pilares que conforman la Agenda Estratégica de la ABM hacia el 2030: Digitalización y bancarización; Empoderamiento y satisfacción del cliente; Impulso al crédito y Educación Financiera, un cambio de sede muy esperado.

Por lo pronto, la moneda está en el aire.

COLUMNAS ANTERIORES

A revisar cambios a la banca
Los nuevos agentes aduanales

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.