OPINIÓN: Dos Bocas, una inversión estratégica que le da independencia a México

En las inmediaciones del puerto marítimo Dos Bocas, se trabaja en la construcción de la nueva refinería
En las inmediaciones del puerto marítimo Dos Bocas, se trabaja en la construcción de la nueva refinería
EN TABASCO.En las inmediaciones del puerto marítimo Dos Bocas, se trabaja en la construcción de la nueva refinería
Cuartoscuro
Joaquín Leal
2020-01-30 |06:49 Hrs.Actualización06:49 Hrs.

Diversas han sido las voces que se han sumado para opinar sobre el controvertido proyecto de construcción de la refinería Dos Bocas en Tabasco, ubicado quizá como uno de los proyectos cumbre del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Si se analiza el proyecto Dos Bocas, desde una perspectiva más bondadosa, y de lo que internacionalmente representaría a México, su edificación y correcto funcionamiento, mostrarían un cambio de paradigma energético con el que mostraríamos al mundo, la postura de un país subdesarrollado, que propone el paso a un modelo de industrialización, típico en países de primer mundo. Además recuperaríamos como nación autosuficiencia en materia energética, aprovechando la posibilidad de dar empleo, inversión y el suministro de combustible en los siguientes años.

Sobre los efectos económicos, Dos Bocas, es una inversión estratégica que le va a dar independencia al país, se va a volver un hub de comercialización de petróleo en Latinoamérica ya que somos de los países con mayor producción petrolera en la región.

Hoy más que nunca por el contexto mundial, hay que reforzar el sector petrolero como una de nuestras fuentes de ingresos, es claro que al menos en los siguientes 40 o 50 años va a seguir el consumo, lo que eventualmente permitiría que en un periodo de 15 a 18 años la inversión -independientemente del monto- se pueda recuperar.

Para quienes consideran que la edificación es regresiva en comparación con lo que otras naciones están realizando para disminuir sus emisiones contaminantes, comparto el comentario del director de la Cátedra UNESCO-Universidad de las Américas de Puebla en Riesgos Hidrometeorológicos, Polioptro Martínez, “el problema de la contaminación mundial es más complicado que sólo dejar de emitir Gases de Efecto Invernadero”.

Un reto mejorar la calidad del aire

Actualmente México está importando y comercializando mucho crudo de otros países,  ya que el que México produce tiene un bajo API  (escala de gravedad que expresa densidad relativa del crudo y otros derivados del petróleo), lo que significa es muy pesado (Maya) razón por la cual cuesta mucho trabajo refinarlo en nuestro país, lo que origina que se está trayendo mucho crudo de Estados Unidos, África y Arabia Saudita  ya que son  más livianos, más dulces y se pueden procesar en nuestras refinerías, por ello el Maya, se tiene que sacar porque no es tan refinable, esto pasa en varios países como Venezuela y Argentina, naciones que lo tienen que “soportar” porque no lo pueden procesar nacionalmente, lo que les orilla a la exportación e importación al igual que México.

Hoy es posible una refinería pero con una apuesta diferente de tecnología. Los transportistas (cuyas unidades generan una gran cantidad de Co2) son los más interesados en trabajar con combustibles menos contaminantes, recordar que recientemente, realizaron un llamado a que la Comisión Reguladora de Energía con la colaboración de la Secretaría de Energía, emita un documento sobre cuándo se tendrá el Diésel Ultra Bajo Azufre (DUBA) en todo el país.

Actualmente el segmento de transporte de carga y pasaje realiza diversas acciones para mejorar la calidad del aire en nuestro país. Las tecnologías más avanzadas como el Euro VI, Epa 10, y las tecnologías vigentes Euro V y Epa 7, van a convivir en tanto no se tenga el diésel DUBA en todo el país, esto para asegurar que los vehículos no se frenen y, por lo tanto, tampoco se frene el autotransporte que impulsa la economía de México.

¿Dijiste Inversión?

“Yo no sé en qué contexto el embajador de China dio esas declaraciones", dijo Rocío Nahle, Secretaria de Energía, sobre la eventual intervención de fondos chinos para la refinería Dos Bocas, pero ¿por qué históricamente se teme a la inversión privada en obra?

Si se analiza, la propuesta no es del todo desagradable. Los chinos claro que pueden tener participación en una especie de banca que dé financiamiento, no solo a este, sino a otros proyectos de infraestructura. 

Lo interesante es blindar que simplemente sean inversionistas, a través de una especie de banca de desarrollo, México puede cubrir con intereses competitivos. Es de conocimiento que China desea el control sobre puertos a nivel mundial ya que ello le permitiría tener conectividad, por eso les interesa invertir, lo importante es el activo, que la refinería sea siempre de México.