CREEMOS QUE IMPORTA POR...
Porque dicen que el pez muere por su propia boca
Las expresiones de Donald Trump llegan a tal nivel que lo afectan a él mismo. Ahora mismo no estaría tan feliz si se hubiera hecho caso a sus denuncias.
Trump está (o estaba) molesto con el sistema electoral desde hace años. No confiaba en él desde 2012, cuando escribió en Twitter que si un candidato obtenía la mayoría de los votos populares pero aún perdía la elección (como Al Gore contra Bush), debería haber una "revolución".
Y este año durante su campaña también se lanzó contra el sistema electoral, incluso llamándolo un "desastre".
The electoral college is a disaster for a democracy.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 7 de noviembre de 2012
We can't let this happen. We should march on Washington and stop this travesty. Our nation is totally divided!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 7 de noviembre de 2012
Ahora seguro te preguntas: ¿por qué dicen que el republicano no debería hacer caso a sus propias ideas?
Porque hoy no sería presidente electo, así de simple.
LA EXPLICACIÓN
Hillary Clinton perdió las elecciones. A estas alturas eso no es noticia. La noche del martes se confirmó que el Presidente 45 de Estados Unidos de América sería Donald Trump.
Además, cada 4 años nos recuerdan que la elección norteamericana es diferente, complicada, que solo importan ciertos estados, hablan de colegios electorales y de swing states. Eso es mucho ruido, pero es importante.
Para cualquier mexicano, lo normal sería que el candidato que tenga más votos gane la carrera presidencial (aunque ganes por un punto porcentual, ganar es ganar). Pero en Estados Unidos gana quien logra conseguir 270 votos electorales, de 380 votos que conforman El Colegio Electoral.
Si el martes 8 de noviembre, en Estados Unidos hubieran usado el sistema electoral mexicano hubiera ganado Hillary Clinton, pues ella obtuvo más votos a nivel nacional. Sí, la mayoría de los votantes eligió a la candidata demócrata, pero eso no bastó para ganar la Casa Blanca. Justo de lo que se quejó Trump desde 2012.
Pero en el sistema norteamericano de Colegio Electoral, el ganador fue Trump. El candidato republicano obtuvo 290 votos electorales, con el apoyo de 59 millones de norteamericanos, mientras que los 60 millones de votantes que apoyaron a Hillary representaron 228 votos electorales.
Donald Trump no fue el primero en criticar al Colegio Electoral. Este sistema es el resultado de una suma de elecciones, no una sola gran elección (como en México). Quien tenga la mayoría de votos en un estado, aunque sea por un voto, se lleva todos los votos electorales que representa ese estado. Por eso, una de las mayores críticas es que le da mayor importancia a ciertos estados. El voto de millones de republicanos en California nunca cuenta, así como los demócratas en Texas.
Ningún sistema electoral es perfecto, todos tienen ventajas y desventajas. Cambiar las reglas electorales puede cambiar los resultados. Lo que hace 4 años Trump acusaba como malo, el martes le dio la silla más importante en la Oficina Oval.