UNA DESPEDIDA HISTÓRICA
La presidenta emérita de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, anunció este jueves que no buscará la reelección, poniendo fin a una de las trayectorias más notables en la historia política de Estados Unidos.
“No me presentaré a la reelección para el Congreso”, dijo en un video dirigido a sus votantes en San Francisco, ciudad a la que ha representado desde 1987.
Optimista y con tono de legado, Pelosi recordó sus décadas de servicio y lanzó un mensaje a su electorado:
“Mi mensaje para la ciudad que amo es este: San Francisco, conoce tu poder. Hemos hecho historia, hemos progresado y siempre hemos liderado el camino.”
Pelosi también pidió a los ciudadanos continuar su lucha por la democracia:
“Debemos seguir participando plenamente y defendiendo los ideales estadounidenses que tanto apreciamos.”
CASI 40 AÑOS EN EL CONGRESO
Durante casi cuatro décadas, Nancy Pelosi fue una pieza central del Partido Demócrata, destacándose por su capacidad de negociación, disciplina política y recaudación de fondos más de mil millones de dólares a lo largo de su carrera.
Su retiro marca el fin de una generación de líderes veteranos en Washington, en un momento en que nuevas voces progresistas emergen dentro del partido. Pelosi, sin embargo, sigue siendo una figura influyente y su salida abre una inevitable lucha por la sucesión en California y en los altos mandos demócratas.
DE MADRE DE 5 A LA MUJER MÁS PODEROSA DEL CAPITOLIO
Pelosi llegó a la política siendo madre de cinco hijos, después de haber trabajado en la política demócrata de California. Su ascenso culminó en 2007, cuando se convirtió en la primera mujer en presidir la Cámara de Representantes, y una de las figuras más poderosas del país.
ENTRE SUS MAYORES LOGROS DESTACAN:
• La aprobación de la Ley de Asistencia Asequible (Obamacare).
• La reforma financiera Dodd-Frank tras la crisis de 2008.
• La derogación de la política militar “Don’t Ask, Don’t Tell”, que discriminaba a miembros LGBTQ+ del ejército.
Con el presidente Barack Obama en la Casa Blanca y Harry Reid al frente del Senado, Pelosi fue una de las arquitectas del ciclo legislativo más productivo desde la era de Lyndon B. Johnson.
SU REGRESO PARA ENFRENTAR A DONALD TRUMP
Tras la ola conservadora del Tea Party que arrebató el control a los demócratas, Pelosi orquestó en 2018 el regreso del partido a la Cámara, impulsando especialmente a mujeres candidatas. Cumplió su promesa de “mostrar el poder del mazo” y se convirtió en la primera presidenta en recuperar el cargo en medio siglo.
Su segundo mandato (2019-2023) fue aún más trascendental: Pelosi lideró los dos juicios políticos contra Donald Trump, primero por retener ayuda a Ucrania y luego por su papel en el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021. También creó la comisión especial del 6 de enero, cuyo informe de mil páginas se convirtió en un documento histórico.
AÑOS DIFÍCILES Y LEGADO PERSONAL
En los últimos años, Pelosi enfrentó momentos complicados. En 2022, su esposo Paul Pelosi fue brutalmente atacado en su casa por un intruso que exigía verla; él sigue recuperándose de las lesiones. Además, el año pasado, la política sufrió una fractura de cadera durante una gira por Europa, aunque continuó activa en su agenda pública.
Aun así, Pelosi ayudó a gestionar el retiro del presidente Joe Biden de la contienda de 2024 y siguió participando en la recaudación de fondos del partido.
EL FUTURO DE LOS DEMÓCRATAS EN CALIFORNIA
Con su salida, se abre una competencia en su distrito de San Francisco. Figuras como Saikat Chakrabarti, exasesor de Alexandria Ocasio-Cortez, y el senador estatal Scott Wiener, han sido mencionados como posibles sucesores.
Aunque deja el Congreso, Pelosi quien asumirá el título de presidenta emérita seguirá siendo una figura de referencia en la política demócrata y en la historia del país.
UNA VOZ QUE SE ESCUCHÓ
Pelosi recordó en su video que el lema de su primera campaña fue “una voz que se escuchará”.
“Y con el respaldo de San Francisco, me convertí en una voz que, sin duda, se escuchó”, concluyó.
Su retiro simboliza el cierre de una era: la de una mujer que redefinió el poder político en Washington, cambió el rostro del liderazgo estadounidense y abrió el camino para las generaciones que siguen.




