Israel declaró este viernes 29 de agosto que la ciudad más grande de Gaza es una “zona de combate peligrosa” y recuperó los restos de dos rehenes más, al tiempo que el ejército israelí lanzaba las “fases iniciales” de una ofensiva planificada que ha suscitado la condena internacional.
A medida que el ejército anunció la reanudación de los combates, autoridades de salud palestinas revelaron que el número de muertos en Gaza aumentó a 63 mil 25, luego que 59 muertes fueron reportadas por hospitales en las últimas 24 horas.
Grupos de ayuda y una iglesia que alberga a la población anunciaron que se quedarán en Ciudad de Gaza, negándose a abandonar a los hambrientos y desplazados.
El cambio se produjo semanas después que Israel revelara por primera vez sus planes para ampliar la ofensiva en Ciudad de Gaza, donde se refugian cientos de miles de desplazados y se declaró una hambruna. En los últimos días, el ejército israelí ha intensificado los ataques en las afueras de la ciudad.
Columnas de humo y explosiones atronadoras se podían ver y escuchar a través de la frontera en el sur de Israel el viernes por la mañana.
Israel ha llamado a Ciudad de Gaza un bastión de Hamas, alegando que una red de túneles sigue en uso a pesar de varias incursiones a gran escala previas en el área a lo largo de casi 23 meses de guerra.
El primer ministro Benjamin Netanyahu ha dicho que Israel necesita incapacitar a Hamás en la ciudad a fin de evitar que se repita del ataque del 7 de octubre de 2023 que detonó la guerra.
Al tiempo que agencias de Naciones Unidas y grupos de ayuda condenaban la decisión israelí, la población en Ciudad de Gaza considera que habrá pocas diferencias porque los ataques ya se estaban intensificando y la ayuda que recibían era insuficiente.
“Las masacres nunca se detuvieron, ni durante las pausas humanitarias”, afirmó Mohamed Aboul Hadi en un mensaje de texto enviado desde la ciudad.
Algunos que huyeron hacia el sur estaban armando tiendas de campaña el viernes en el centro de la Franja de Gaza, al oeste del campamento de refugiados de Nuseirat. Describieron las miserables condiciones que han soportado.
“Nos tiran a las calles como, ¿qué diría yo?, ¿como perros? No somos como perros. Los perros son mejores que nosotros”, lamentó Mohammed Maarouf frente a un refugio para él y su familia de nueve personas.
Más de 63 mil palestinos han sido asesinados desde que comenzó la guerra, informó el Ministerio de Salud de Gaza el viernes.
El conteo del ministerio —63 mil 25— no distingue entre combatientes y civiles. También dijo que cinco personas habían muerto por causas relacionadas con la desnutrición en las últimas 24 horas, elevando el número a 322, incluyendo 121 niños, desde que comenzó la guerra.
El Ministerio es parte del gobierno dirigido por Hamas y está compuesto por profesionales médicos. La ONU y expertos independientes lo consideran la fuente más confiable sobre las bajas de guerra. Israel cuestiona sus cifras pero no ha proporcionado las propias.