WASHINGTON. — El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó una orden ejecutiva este miércoles 6 de agosto para imponer un arancel adicional del 25% a India por sus compras de petróleo ruso, elevando a 50% los gravámenes combinados impuestos a ese país.
Los aranceles entrarían en vigor 21 días después de la firma de la orden, lo que significa que India y Rusia podrían tener tiempo para negociar con el gobierno sobre los impuestos a la importación.
Las medidas de Trump podrían alterar la trayectoria económica de India, que hasta hace poco era vista como una alternativa a China por las empresas estadounidenses que buscan reubicar su fabricación. China también compra petróleo a Rusia, pero no estaba incluida en la orden firmada por el presidente republicano.
Como parte de un período de negociación con Beijing, Trump ha impuesto aranceles del 30% a los productos chinos, una tasa menor que los impuestos de importación combinados con los que ha amenazado a Nueva Delhi.
El mandatario adelantó el martes a los periodistas que los aranceles eran inminentes y señaló que Estados Unidos sostuvo una reunión con Rusia el miércoles mientras su gobierno intenta poner fin a la guerra en Ucrania.
“Vamos a ver qué pasa”, dijo Trump sobre sus planes de aranceles. “Tomaremos esa determinación en ese momento”.
El gobierno indio calificó el miércoles los aranceles adicionales como “desafortunados”.
“Reiteramos que estas acciones son injustas, injustificadas e irrazonables”, dijo en un comunicado el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Randhir Jaiswal, y agregó que India tomaría todas las medidas necesarias para proteger sus intereses.
Jaiswal dijo que su país ya ha dejado clara su posición de que las importaciones indias se basan en factores de mercado y son parte de un objetivo general de garantizar la seguridad energética para sus mil 400 millones de habitantes.
En 2024, Estados Unidos tuvo un déficit comercial de 45 mil800 millones de dólares con India, lo que significa que importó más de lo que exportó, según la Oficina del Censo del país. Los consumidores y empresas estadounidenses adquieren productos farmacéuticos, piedras preciosas, textiles y prendas de vestir de India, entre otros bienes.
India es el país más grande del mundo y, para Estados Unidos, representaba una forma de contrarrestar la influencia de China en Asia. Pero Nueva Delhi no ha apoyado las sanciones de Washington y sus aliados contra Moscú en relación con la guerra en Ucrania, aun cuando los líderes indios han mantenido que quieren la paz.
Actualmente, Estados Unidos y Beijing están en negociaciones comerciales, mientras Washington ha impuesto un arancel del 30% a los productos chinos y enfrenta un impuesto de represalia del 10% sobre los productos estadounidenses.
Los aranceles que se planea imponer a India contradicen los esfuerzos del gobierno del expresidente Joe Biden y otras naciones del Grupo de los Siete, integrado por los principales países industrializados, que alentaron a India a comprar petróleo ruso barato a través de un tope de precios impuesto en 2022. Las naciones limitaron colectivamente el precio del petróleo ruso a 60 dólares por barril en un momento en que los precios en el mercado eran significativamente más altos.
La intención era privar al Kremlin de ingresos para financiar su guerra en Ucrania, obligando al gobierno ruso a vender su petróleo con descuento o a desviar dinero para una costosa red de envío alternativa.
El tope de precios se implementó con partes iguales de escepticismo y esperanza de que la política evitaría la invasión de Ucrania por parte del presidente ruso Vladímir Putin.
El tope ha exigido que las compañías de envío y seguros se nieguen a manejar envíos de petróleo por encima del mismo, aunque Rusia ha podido evadirlo enviando petróleo en una “flota sombra” de viejos buques utilizando aseguradoras y compañías comerciales ubicadas en países que no aplican sanciones.
Pero los precios del petróleo han caído, y el miércoles por la mañana se vendía en 65.84 dólares por barril, un aumento del 1%.