Una intensa tormenta azotó la noche del lunes 14 de julio el noreste de Estados Unidos, provocando severas inundaciones en Nueva York y Nueva Jersey, y dejando caos en el transporte terrestre y aéreo.
Lo que inició como una llovizna habitual se transformó rápidamente en una emergencia, obligando a declarar el estado de emergencia en Nueva Jersey y suspendiendo líneas del Metro en Manhattan.
El sistema subterráneo de Nueva York, conocido por su actividad constante, quedó inoperante en varias zonas debido a que el agua se filtró por techos, vías y escaleras.
“Los trenes uno, dos y tres están suspendidos en Manhattan mientras atienden las inundaciones en varias estaciones”, informó el NYCT Subway en su cuenta de X, indicando también afectaciones en las líneas 2/3 en el centro de la ciudad. “Personas quedaron detenidas en los trenes por más de una hora debido a las inundaciones”.
Imágenes difundidas en redes sociales muestran estaciones bajo el agua y pasajeros que tuvieron que subirse a los asientos del tren para evitar mojarse. La situación fue particularmente crítica en estaciones como las de las calles 23 y 38. En el caso de NJ Transit, el servicio ferroviario reportó retrasos por “problemas de señal debido al clima”, y permitió el uso de boletos de tren en autobuses y transportes privados.
Durante la madrugada del martes, personal de la MTA trabajó para recuperar el servicio. “Se restauró por completo el servicio del metro, tanto en las cercanías de Long Island Railroad como en Metro North”, declaró Janno Lieber, presidente de la dependencia, a ABC 7. Agregó que el sistema de alcantarillado se vio “abrumado” por la intensidad de la lluvia, lo que provocó desbordamientos y escenas como “géiseres” al levantar tapas de alcantarilla.
La emergencia también se extendió al tráfico aéreo: “Durante las lluvias torrenciales del lunes y la mañana del martes se cancelaron 377 vuelos en los aeropuertos de Nueva York, Washington y Boston”, según la plataforma FlightAware. El aeropuerto Newark Liberty fue el más afectado con un 13% de cancelaciones, seguido por LaGuardia con 6%.
Aunque las alertas de inundación fueron retiradas conforme la tormenta avanzó, las autoridades continúan evaluando daños y trabajando en medidas para mitigar futuras emergencias de este tipo.
