Luego de este fin de semana pilotos de Estados Unidos lanzaron bombas sobre tres instalaciones nucleares de Irán (Fordow, Natanz e Isfahán), más detalles de lo ocurrido siguen saliendo a la luz.
La operación Midnight Hammer (Martillo de Medianoche), con la que Estados Unidos atacó por sorpresa, fueron el mayor bombardeo con aviones B-2 de la historia del país.
Se trató de una acción preparada y, en total, se emplearon 75 bombas y misiles. Al respecto, se han revelado imágenes del antes y después del atentado, que dan cuenta de la destrucción ocasionada:
ISFAHÁN, ANTES Y DESPUÉS
En la segunda ciudad más poblada de Irán, Isfahán, hay una instalación de conversión de uranio.
Este lugar fue atacado por un submarino estadounidense, que lanzó más de dos docenas de misiles de crucero contra las instalaciones nucleares, mientras las aeronaves llegaban a espacio aéreo iraní.
En este lugar se puede procesar uranio en hexafluoruro de uranio y fabricar uranio metálico, un proceso que puede utilizarse para diseñar el núcleo de una bomba nuclear.
FORDOW, ANTES Y DESPUÉS
Por su parte, en las imágenes de satélite de la planta de enriquecimiento de uranio de Fordow, se observan los cráteres y agujeros provocados por las bombas antibúnker, mientras que los túneles de entrada a las instalaciones parecen colapsados o bloqueados.
En este sentido, medios iraníes han revelado que, como medida preventiva, el gobierno de ese país habría trasladado la mayor parte de sus reservas de uranio a un lugar no revelado.
NATANZ, ANTES Y DESPUÉS
Uno de los últimos objetivos alcanzados fue Natanz, que alberga dos plantas de enriquecimiento de uranio con capacidad para hasta 50 mil centrifugadoras, aunque actualmente están en funcionamiento unas 13 mil, refinando uranio hasta un 5% de pureza.
