Porque este tipo de hechos es una clara violación a los derechos humanos
Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional (Sedena), informó que se investiga a 24 militares en la ejecución de un civil presuntamente sometido en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
El titular de la Sedena aseguró que desde la fecha en que se dieron a conocer los hechos, la Fiscalía General de Justicia Militar inició las investigaciones correspondientes.
"Son 22, 24 elementos los que están involucrados en el desarrollo de esa, actividad, de esa agresión que se tuvo por parte de la delincuencia, son los que respondieron y en esos casos nuevamente la fiscalía, hace la investigación completa a todo el personal que esté involucrado para poder identificar perfectamente cuál fue la situación y si tuvieron excesos o lo que resulta de la investigación que ellos hacen“.
El funcionario indicó que en caso de que las indagatorias demuestren que los militares tienen responsabilidad en este caso, se dará parte a la Fiscalía General de la República porque está implicado un civil.
"La Fiscalía nos hará del conocimiento cuál será el resultado de las investigaciones y si en algún momento tiene que derivarlo a la parte civil, a la Fiscalía General de la República, la Fiscalía General de Justicia Militar lo hará a través de los conductos para derivarlo y que siga la investigación, al estar involucrado un civil Dentro de la actividad militar No lo juzga La jurisdicción militar lo tendrá que juzgar la parte federal“, dijo.
"Mátalo a la verga" fue la indicación que un militar dio a sus compañeros, luego de que un civil sobreviviera a un enfrentamiento entre elementos de la Secretaría de Marina e presuntos integrantes del crimen organizado, en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
En un video publicado por El Universal, se observa el momento en que tras un enfrentamiento uno de los civiles queda con vida. "¡Está vivo, está vivo!", se escucha decir a algunos de los militares, a quienes otro contesta: "¡mátalo a la verga!".
Este video, detalló el medio, contradice a la versión oficial presentada por las autoridades quienes aseguraron que tras el cese al fuego no quedó nadie con vida y contabilizaron 12 personas muertas.
Los hechos ocurrieron la madrugada del pasado 3 de julio en Nuevo Laredo y el 14 de dicho mes, El Universal reveló que entre las personas muertas se encontraban tres civiles secuestrados por el crimen organizado, todos estudiantes y quienes fueron contabilizados entre las 12 víctimas.
