La polémica sobre la reducción de la jornada laboral en México continúa debido a que los diputados dejaron "en la congeladora" la reforma, pero ese no es el único problema que enfrenta, ya que siete de cada 10 mexicanos prefieren dejar las su horario como está y ganar más dinero.
La agencia de investigación de mercados y opinión pública Quiddity encuestó en enero pasado a 3 mil 091 personas de Argentina, México, Brasil y Colombia para saber cómo sería su jornada laboral ideal.
De acuerdo con Expansión, a 31% de los encuestados le gustaría reducir la semana laboral, aún si eso implica alargar la jornada diaria o una reducción del salario; siete de cada 10 mexicanos prefieren mantener su trabajo tal cual está, a 21% le gustaría trabajar menos días a la semana, aunque eso signifique laborar más horas al día para mantener el mismo salario, mientras que solo el 10% está dispuesto a laborar menos días a la semana, con una posible reducción salarial.
Diego León, director de Quiddity México, considera que en parte esta idea viene de la pandemia y los cambios en las modalidades de empleo, ya que los colaboradores en un formato híbrido o remoto suelen extender su jornada laboral en casa, por lo tanto, no tienen problema en aumentar las horas por día, con tal de obtener un día adicional de descanso, sin que sus ingresos sean alterados. “Sacrifico mi tiempo, pero no mi ingreso”, dice.
La reforma que propone modificar el artículo 123 de la Constitución para que por cada cinco días de trabajo hayan dos de descanso (ocho horas menos a la semana), da por sentado que el salario no debe modificarse. Y en caso de que se apruebe la iniciativa, los empleadores que reduzcan el salario estarían incumpliendo con la ley.
De acuerdo con la Ley Federal del Trabajo (LFT), el patrón puede reducir el sueldo, sólo si el trabajador acepta, es decir, que tiene que haber un común acuerdo, así como una notificación con 30 días de anticipación.