La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo salió al paso ante los señalamientos derivados de del evento en el Zócalo de la Ciudad de México, por los siete años de la Cuarta Transformación y descartó la presencia de acarreados.
Ante las críticas de sus opositores, por el origen de los asistentes al mitin, Sheinbaum afirmó que su gobierno no aceptaría nunca la entrega de dádivas, a cambio de que la gente asista a un evento.
Incluso dijo que de haber sido así, la concentración no hubiera estado llena de buen ánimo.
“Nunca aceptaríamos eso, siempre hemos estado en contra de cualquier dádiva a cambio de participar en un evento (...) Eso no debe ocurrir, no hubiera habido el entusiasmo en esa manifestación si hubiera un acto masivo de compra para venir”, comentó Sheinbaum en conferencia mañanera.
