La presencia de la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, en México generó una pregunta central entre la sociedad: “¿a qué vino exactamente la mandataria centroamericana?“.
De acuerdo con la información difundida por el gobierno federal, la visita, de carácter oficial, tiene como eje la revisión de proyectos conjuntos y el reconocimiento al cierre de su periodo presidencial.
La presidenta Claudia Sheinbaum informó desde un día antes que la llegada de Castro sería parte de una visita de Estado que incluiría encuentros privados.
“Viene mañana, la recibimos con en una visita formal, de nación a nación, de Estado a Estado, hacemos la celebración como siempre lo hacemos”.
Tras el protocolo inicial, añadió, se llevarían a cabo varias reuniones para fortalecer los vínculos entre ambos países. “La recibimos, cantamos, más bien se tocan los dos himnos y después ya van a ser una serie de reuniones privadas que vamos a tener con ella, hermanando todavía más la buena relación que hay con Honduras”.
Al mediodía, Sheinbaum salió a la Puerta de Honor de Palacio Nacional para recibir a su homóloga, aunque tuvo que esperar algunos minutos ante el retraso del convoy hondureño, que modificó su ruta debido al operativo de seguridad por la marcha del 25N.
La mandataria mexicana aguardó sola frente al inmueble, donde habitualmente hay tránsito de visitantes, pero que hoy permanecía cerrado con vallas metálicas.
En su mensaje previo, Sheinbaum había insistido en que el encuentro representa un reconocimiento a la labor de Castro.
“Xiomara ya está por cerrar su su ciclo en la presidencia, nos hemos hecho buenas amigas desde que la conocí, que vino. También es un reconocimiento al trabajo que ha hecho al frente del gobierno de Honduras“.
Señaló además que ambos países mantienen una relación activa en materia económica y en distintos programas bilaterales: “Hay mucha relación con Honduras de actividad económica y muchas otras actividades que se han hecho hasta ahora y que pretendemos que continúe”.



