El Episcopado de México reconoció la conducción de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo durante su primer año de gobierno donde, dice, “hubo un avance constitucional”, aunque también enmarcó los pendientes que hay por atender.
A través de un comunicado, el Episcopado indicó que “los Obispos de México reconocemos el avance constitucional y cultural que ha significado la asunción a la Jefatura del Estado Mexicano de la primera mujer en ocupar la titularidad del Poder Ejecutivo”.
Destacó que “el pueblo de México ha mostrado que no posee el ánimo discriminatorio que puede observarse en otros países, y la elección y ejercicio de la Dra. Sheinbaum en este primer año así lo acredita”.
En ese sentido, también hizo reconocimiento de los retos tanto nacionales como internacionales que ha enfrentado la mandataria.
Pese a las palabras de reconocimiento, subrayó que “el problema de la falta de seguridad y Estado de derecho dista mucho de haberse resuelto, sin duda, nuestras comunidades todavía sufren el agobio del crimen; sin embargo, constatamos que la estrategia de seguridad propuesta desde hace un año por la Presidenta, además de la campaña de desarme y las reformas para combatir el crimen organizado, comienzan a rendir frutos”.
En este renglón refrendó su ofrecimiento de seguir apoyando en la búsqueda de la paz y la concordia.
Indicó que “no pasamos por alto que la disminución de la violencia tiene que ir de la mano que la disminución de la corrupción, cáncer social de inimaginables alcances, que tanto daño causa a la esperanza de un México próspero. Auguramos mayores logros en este rubro para consolidar la paz desarmada y desarmante a la que nos ha invitado el Papa León XIV desde el inicio de su pontificado".
En el tema económico, destacó que la situación del país, a pesar del bajo crecimiento que viene arrastrándose desde las anteriores administraciones, “permite contemplar una reducción significativa del coeficiente de desigualdad. Apreciamos en todo lo que valen los logros alcanzados en esta materia, sin embargo, no se nos oculta, que el grave lastre histórico de la pobreza se halla todavía lejos de la disminución que nuestro pueblo merece y desea”.
Ya en el ámbito internacional, dijo, “saludamos los esfuerzos diplomáticos y de negociación que han impedido una colisión de grandes alcances con nuestros principales socios comerciales, tanto en el rubro arancelario como en el de la seguridad común” e hicieron un “llamado a no ceder en la defensa de nuestros connacionales y de toda persona que realiza, con grande y honesto esfuerzo, una labor de carácter migratorio y transfronterizo”.
Además abordó la reforma judicial, la cual, dijo, “distó mucho de ser un proceso pulcro y democrático; tal como lo dijimos hace un año, renovamos nuestra exhortación a defender el imprescindible acceso generalizado a la Justicia”.
Finalmente, sobre la Reforma Electoral que viene en los próximos meses, añadió, “hacemos votos para que la eventual reforma consolide el reconocimiento del pluralismo que caracteriza a la sociedad mexicana y sostenga los cauces democráticos que han cimentado la convivencia republicana desde finales del siglo pasado”.