La presidenta Claudia Sheinbaum advirtió este jueves que su gobierno no tolerará el contrabando ni la evasión de impuestos en la importación de combustibles, en lo que denominó como una ofensiva frontal contra el llamado huachicol fiscal.
Durante su conferencia matutina, aseguró que se llegará “hasta las últimas consecuencias” contra quienes simulan operaciones legales para evitar el pago de impuestos como el IEPS o el IVA.
“Vamos a poner fin al llamado huachicol fiscal”, declaró la mandataria, tras explicar que su administración ya inició acciones tanto administrativas como penales contra los responsables de este esquema fraudulento.
Sheinbaum señaló que existen al menos dos mecanismos frecuentes utilizados para burlar al fisco: uno es declarar hidrocarburos como si fueran productos químicos; el otro, emplear facturas falsas para simular legalidad. También reveló que se están revisando los permisos de importación emitidos por la Secretaría de Energía, incluidos los heredados de sexenios anteriores.
La presidenta abordó el tema en respuesta a un mensaje reciente de la Embajada de Estados Unidos, el cual confirmó que parte del crudo robado en México es procesado en refinerías estadounidenses y posteriormente regresa al país de forma ilegal.
Además, Sheinbaum advirtió que se está investigando toda la ruta del contrabando, desde el origen del combustible en refinerías estadounidenses, los centros de almacenamiento, los compradores y los importadores mexicanos involucrados.
“Nada más, sobre el huachicol, vamos a llegar hasta las últimas consecuencias, las investigaciones están dando mucha información y nuestro objetivo es que todo sea legal, igual que en otros casos, que todo sea legal, que si hay combustible importado que paguen los impuestos que tienen que pagar y que sepamos a qué gasolinera va a ir”, remarcó, elevando la voz y gesticulando con la mano.
