La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo reafirmó que su gobierno está “en contra de la censura” y a favor de la libertad de expresión, en respuesta al caso del periodista Jorge González Valdez, vinculado a proceso por presunta incitación al odio y violencia contra la gobernadora de Campeche, Layda Sansores.
Durante su conferencia de prensa matutina, la mandataria declaró que, aunque desconoce a fondo los detalles del caso, su postura es clara: “Cualquier cosa que tenga que ver con la censura, estamos en contra”.
Ante la pregunta expresa sobre si está garantizada la libertad de expresión en México, respondió: “Está garantizada la libertad de expresión, y las y los gobernadores deben garantizarla”.
El caso ha generado polémica a nivel nacional. Jorge González Valdez, periodista con más de cinco décadas de trayectoria y exdirector del portal Tribuna, aseguró en entrevista con el periodista Ciro Gómez Leyva que enfrenta una persecución política promovida por el gobierno de Layda Sansores.
Según su testimonio, la jueza Guadalupe Martínez Taboada no solo lo vinculó a proceso, sino que también ordenó el cierre de su medio, le prohibió ejercer el periodismo durante dos años, impuso una indemnización de dos millones de pesos por daño moral al director de Comunicación Social del estado y autorizó el embargo de varias de sus propiedades.
“Desde que comenzó el gobierno de la señora Sansores, los campechanos hemos visto que la libertad de prensa y expresión están totalmente amenazadas”, expresó González Valdez, quien considera que la resolución judicial obedece a una represalia por sus críticas hacia la administración estatal.
En el mismo tono, Sheinbaum fue cuestionada por la reciente controversia generada en Puebla, donde se aprobó una ley que sanciona el uso indebido de tecnologías de la información. Al respecto, señaló que el gobernador Alejandro Armenta “ya abrió un parlamento para discutirlo” y reiteró la postura del gobierno federal: “Nosotros estamos en contra de la censura”.
Finalmente, ante la posibilidad de dirigirse directamente a Sansores, Sheinbaum respondió que revisará el caso y recalcó que “todo lo que tenga que ver con coartar libertad de expresión no debe ser castigado, y menos penalmente”.