Ante la polémica generada por la posible regularización de viviendas invadidas del Infonavit, la presidenta Claudia Sheinbaum aclaró este martes que su gobierno no permitirá que se vulneren los derechos de propiedad de los trabajadores.
En su conferencia matutina, subrayó que cualquier acción estará sujeta al respeto constitucional de la propiedad privada y que no se expropiará a ningún legítimo propietario.
“En primer lugar, la propiedad privada está resguardada, eso es por Constitución. Nosotros la vamos a resguardar, no se trata de quitarle una vivienda a quien le pertenece, eso tiene que quedar muy claro, para que no haya estas malas interpretaciones que se hicieron por parte de algunas personas que escriben en los medios”, declaró.
La controversia surgió luego de que el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) informara que analiza opciones para recuperar miles de viviendas abandonadas o invadidas, muchas de las cuales se ubican en zonas remotas o de difícil acceso. De acuerdo con Sheinbaum, el problema tiene raíces profundas:
“Durante mucho tiempo el Infonavit se dedicó a construir viviendas alejadas de los centros de población, en donde los trabajadores hicieron créditos, y en primer lugar hubo muchísimo fraude, muchísimas viviendas que se vendieron cinco veces”.
La presidenta explicó que muchos trabajadores abandonaron sus casas porque les tomaba hasta tres horas llegar a sus lugares de trabajo. En muchos casos, dejaron de habitarlas sin rentarlas o revenderlas, lo que dejó un parque habitacional vacío o irregular.
Frente a esta situación, Sheinbaum sostuvo que se busca una solución legal y justa para evitar que estos inmuebles permanezcan en el abandono.
Reiteró que cualquier propuesta del Infonavit deberá garantizar que no se afecte a quienes adquirieron sus viviendas legalmente y que, en caso de deudas, se les apoye para resolverlas, especialmente si nunca llegaron a habitar las casas.
