En medio de la incertidumbre generada por el anuncio reciente del cierre de la planta Michelin en Querétaro, el gobierno federal destacó un nuevo compromiso de inversión extranjera: Heineken México confirmó una inversión de 2 mil 750 millones de dólares que se ejecutará hasta 2028, incluyendo la construcción de una nueva planta cervecera en el sureste del país.
Durante la conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, presentó a Oriol Bonaclocha, nuevo CEO de Heineken México, como el responsable de detallar este proyecto que, subrayó, forma parte de la estrategia de atraer inversiones a regiones con disponibilidad hídrica, como el sureste mexicano.
“Es una inversión muy grande de más de 2 mil 700 millones de dólares, destaco que es en Yucatán… tiene un gran impacto en empleos. Está en el portafolio de inversión que presentamos los lunes. Se está buscando que las empresas se instalen donde hay agua, por eso Yucatán”, dijo Ebrard, quien también destacó que Bonaclocha ha estado ligado al país por más de dos décadas.
El CEO de la compañía cervecera destacó que la inversión contempla una nueva planta en el municipio de Kanasín, Yucatán, que generará más de 3 mil empleos directos e indirectos, con una operación enfocada en el abastecimiento eficiente y sustentable de la península.
“Nos sentimos orgullosos de que, a través de nuestra operación, seamos parte de este crecimiento sostenido. Hoy reafirmamos nuestro compromiso con México… con una visión enfocada en crecimiento, innovación y sustentabilidad”, dijo Bonaclocha.
La planta será la octava de la compañía en territorio nacional y se construirá bajo una visión de respeto ambiental y social. Bonaclocha enfatizó que, por primera vez en el sector, se realizó una consulta indígena, además de un proceso de vinculación con proveedores locales en coordinación con el gobierno de Yucatán.
El anuncio llega en un momento clave para la administración federal, que busca destacar la llegada de inversiones tras la polémica provocada por el anuncio del cierre de operaciones de Michelin en Querétaro, debido —según dijo la empresa francesa— a una reconfiguración de su estrategia global.
Frente a ese contexto, la inversión de Heineken fue presentada como una muestra de confianza en México. Bonaclocha recordó que la empresa lleva 135 años en el país, con siete plantas cerveceras, una planta maltera, 170 centros de distribución y más de 17 mil tiendas Six.
Además de su apuesta productiva, el ejecutivo también subrayó el papel de Heineken en el impulso de iniciativas culturales y deportivas, como la Fórmula 1, el Tecate Pal Norte y el Vive Latino, a través de campañas de consumo responsable.
“Confiamos en México, en su gente y en todo lo que podemos construir juntos, porque aquí nació nuestra compañía en 1890, y porque aquí continuaremos haciendo historia”, concluyó.