La gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, indicó que las autoridades sí avisaron a la población sobre la crecida del río Cazones y otros cuerpos de agua que posteriormente se desbordaron e inundaron Poza Rica y otros municipios.
Cuestionada sobre si se había emitido una alerta puntual sobre el riesgo que implicaban las lluvias, la mandataria negó que no se diera aviso oportuno.
"Aquí en Poza Rica, a las tres de la mañana, el día de de los hechos, la alarma de Pemex sonó, y aparte Protección Civil empezó a vocear. De esa manera, se pudo evacuar a miles de personas. Otras personas no quisieron dejar su casa o no pudieron, no sé, pero sí sonó la alarma y no había manera de que se midiera la cresta antes”, dijo.
Aseguró que la crisis que se vive en la entidad tras las lluvias torrenciales que dejaron decenas de municipios y colonias afectadas, se debió a las precipitaciones y la geografía del estado.
“De los hermanos estados vecinos bajó muchísima agua, más la lluvia que teníamos en Veracruz. El río Cazones, que baja principalmente desde Puebla, Hidalgo, se desbordó e inundó una parte muy importante de Poza Rica (...) Y aquí en Veracruz, nuestra geografía, pues, está aquí abajo, porque pues todos los ríos desembocan en el Golfo de México”, explicó
