La madrugada de este sábado, un paciente de la clínica 71 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Torreón, Coahuila, tuvo una crisis psicótica, lo que causó pánico entre el personal.
Ante la situación, se desplegó una intensa movilización de cuerpos de rescate y seguridad para controlar la crisis.
A través de un comunicado, el IMSS informó que el paciente, identificado como Jaime ‘N’, diagnosticado con esquizofrenia, ingresó inicialmente al Hospital General de Zona (HGZ) No. 16 de Torreón la madrugada del viernes, acompañado de un familiar, debido a lesiones aparentemente autoinfligidas.
Tras ser estabilizado, fue trasladado a la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) No. 71 con el objetivo de realizar estudios complementarios.
Sin embargo, durante su estancia presentó un brote psicótico que lo llevó a ocasionar daños materiales en el área de consulta, por lo que personal de seguridad intervino para contenerlo y decidió su regreso al HGZ No. 16, donde especialistas en psiquiatría iniciaron un tratamiento específico.
A pesar de la atención recibida, durante la madrugada del sábado el paciente experimentó un nuevo episodio de descontrol, pues logró salir del área de aislamiento del hospital y causó destrozos en el área de Urgencias y en la de Consulta de Medicina Familiar.
Además, adoptó una conducta considerada de alto riesgo tanto para sí mismo como para el personal médico que intentaba auxiliarlo.
De acuerdo con testigos, Jaime ‘N’ mostró episodios de agresividad y confusión y en un momento crítico logró escapar de la vigilancia hospitalaria.
Después trepó hasta la azotea de la farmacia, lo que incrementó la tensión en el lugar y obligó a solicitar el apoyo de instancias externas.
Al lugar acudieron elementos del Cuerpo de Bomberos, Protección Civil de Torreón y la Dirección de Seguridad Pública Municipal.
Los rescatistas intentaron dialogar con el paciente para persuadirlo de bajar, pero los esfuerzos no dieron los resultados esperados.
Ante el riesgo de que se lanzara desde lo alto del edificio, se decidió emplear una línea de agua de una y media pulgada para inmovilizarlo y reducir la posibilidad de que atentara contra su vida o lesionara a terceros.
Durante las maniobras de contención, Jaime ‘N’ cayó desde la azotea, lo que le provocó nuevas lesiones, pero fue trasladado de inmediato nuevamente al área de hospitalización, donde hasta el último reporte permanecía bajo atención médica especializada.
El IMSS explicó que el paciente ya se encuentra bajo tratamiento psiquiátrico y con vigilancia médica estrecha, al tiempo que reiteró su compromiso de ofrecer atención oportuna y digna.