La familia de Ángel vive momentos complicados pues el joven se encuentra inmóvil y sin poder hablar luego de golpearse en la cabeza con una banca de la Preparatoria 2 de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), en el municipio de Monterrey.
De acuerdo con el testimonio de Sealiah Leura, madre del menor de edad, su hijo fue golpeado con un pupitre en su salón.
Tras el golpe, dijo "recibo una llamada de la doctora del plantel para decirme que mi hijo Ángel había sufrido un accidente y que le habían pegado con un banco (pupitre) pero que no era de gravedad que solo tenía que ir por él, porque no se sentía bien“.
Después habló con el hermano gemelo de Ángel, quien le comentó que lo veía con las pupilas dilatas, fue entonces cuando Sealiah decidió ir de urgencia al plantel para conocer el estado de salud de su hijo.
“Fui directo a la preparatoria, cuando llegó, lo encuentro en la cafetería afuera en una silla de ruedas y claro que le dije a la maestra que si ya habían marcado a una ambulancia, a lo cual me dice que ‘no’, que me estaban esperando a mi a ver dónde lo llevaríamos cuando en su expediente todas tenemos la obligación de poner su clínica de emergencia”, comentó.
Explicó que se sintió conmovida al ver a su hijo sin moverse y no poder hablar, pero se tranquilizó y pidió llevarlo a un hospital cercano, aunque antes de que llegara la ambulancia fue atendido por un médico, padre de uno de los alumnos.
Una vez en el hospital fue atendido por el neurólogo y ahora la familia está en espera de que les informen cuál es la evolución de Ángel.
