Víctor Jacobo Rodríguez, actual presidente municipal de Piedras Negras, Coahuila, se colocó en el centro de la polémica tras un tenso choque con una reportera que lo cuestionó sobre su disposición a someterse a una prueba antidoping y difundir los resultados.
La periodista Lucy le preguntó: “¿Estaría usted dispuesto a someterse también a pruebas de antidoping e informar a la ciudadanía de su resultado toxicológico para poner el ejemplo como primera autoridad?”. Rodríguez respondió molesto:
“Nunca vienes a la mañanera y hoy vienes a quererme atacar de esa manera. ¿Qué comportamiento has visto tú en mí para que pienses que yo ando drogado?”. El cruce de palabras terminó cuando el micrófono de la comunicadora fue apagado.
Más tarde, el alcalde reconoció que “debió haber contestado de otra manera”, admitiendo que actuó impulsivamente. Aun así, sostuvo que la reportera “históricamente, siempre lo ha golpeteado” y que mantienen una “relación de fricción”. Finalmente, aseguró que estaba dispuesto a realizarse la prueba junto con su gabinete.
DE ECONOMISTA A ALCALDE
Rodríguez, de 37 años, llegó a la presidencia municipal para el periodo 2025-2027 bajo las siglas de Morena. Su trayectoria política incluye una candidatura previa al mismo cargo en 2021 por el Partido del Trabajo (PT) y su participación en las elecciones locales de 2023 como aspirante a diputado por Morena.
Su formación académica incluye una licenciatura en Economía y un doctorado por el Instituto Universitario de Puebla, así como un curso especializado en Sistema de Control Interno Institucional.
Antes de su carrera política en Coahuila, trabajó como asesor en el Congreso de Tabasco (2014-2016) y como jefe de adquisiciones en la Secretaría de Educación Pública (2010-2012).
ESTILO DE GOBIERNO MARCADO POR LAS POLÉMICAS
No es el primer momento de tensión en su gestión. En mayo pasado, acusó un complot en su contra luego de que regidores rechazaran aprobar la cuenta pública por presuntas irregularidades en la Tesorería. Según reportes de prensa, los ediles denunciaron desorden administrativo y falta de transparencia.
La controversia por las pruebas antidoping se originó meses antes, cuando el propio Rodríguez ordenó su aplicación masiva a bomberos, policías e inspectores tras un incidente en el que un bombero agredió al esposo de una funcionaria.
De las 200 pruebas aplicadas, cinco empleados resultaron positivos a marihuana, cocaína y opioides, siendo dados de baja.
En medio de la polémica con la prensa, el alcalde se sometió voluntariamente a un examen toxicológico junto a su gabinete. Los resultados fueron negativos a marihuana, cocaína, opiáceos, metanfetaminas y anfetaminas.
Tras ello, anunció que impulsará una iniciativa legislativa para que todos los servidores públicos del país, incluidos gobernadores y alcaldes, se realicen pruebas periódicas como medida de transparencia y para reforzar la confianza ciudadana.