El sur del Edomex, la clave de Alfredo del Mazo para ganar las elecciones

Del Mazo visitó uno de los rincones más alejados del Estado de México
Del Mazo visitó uno de los rincones más alejados del Estado de México
En Tejupilco.Del Mazo visitó uno de los rincones más alejados del Estado de México
Enrique I. Gómez
Enrique I. Gómez
Corresponsal
2017-05-03 |19:51 Hrs.Actualización19:51 Hrs.
CREEMOS QUE IMPORTA POR...

Porque las encuestas ya no lo dan como seguro ganador

Alfredo del Mazo Maza está sobre tierra caliente… dividida en cuadrantes.

Con Delfina Gómez pisándole los talones o con la presunción de ya haberlo rebasado, el candidato del PRI al gobierno estatal programa un solo evento público y en uno de los rincones más alejados del Estado de México: Tejupilco.

Literal, está en otro rincón, en la comunidad Rincón de Jaimes. Al “foro sociocultural” que en realidad es el palenque donde acaba la vida de los gallos de pelea, llegan cientos de hombres y mujeres de Tejupilco, Tlatlaya, Amatepec y Luvianos.

El calor abraza afuera y condensa adentro. Los sureños atraviesan ralos lomeríos para llegar a la cita con Del Mazo, quien ofrece un discurso que dura menos de 20 minutos, suficientes para constatar que la estructura tricolor esta aceitada. Los cuadrantes trabajan.

Susana Orozco, vecina de Tejupilco, es una activista leal, dice recibir 500 pesos a la quincena, al ser parte de la estrategia del PRI para ganar los comicios de gobernador del 4 de junio.

“Estoy como cuadrante, son los que andamos casa por casa en el toque de puertas, tenemos un coordinador al que tenemos que reportarle de toda la gente”, expresa.

Cada cuadrante, señala, tiene a cargo 45 casas, en su colonia son en total 14 cuadrantes, más el coordinador, sin contar otra estructura que también prevé que entre a colaborar con ellos. “Estamos fuertes la verdad”.

Síguenos en Twitter @nacion321

Detalla que dependiendo de las preferencias detectadas en su lista colocan un asterisco si la persona no está convencida, si es de otro partido una "x", por el contrario quienes apoyan al PRI son identificados con una paloma.

Mientras ve como se despide Del Mazo y aborda la camioneta blanca que será escoltada por dos automóviles, doña Susana narra que ahora la promoción del voto es más estricta, pues antes podían únicamente juntar las credenciales de elector. Ahora su trabajo es monitoreado desde Toluca.

“Marcan, oiga señora Susana Orozco usted qué opina del partido, del PRI, ¿contamos con su voto?”, explica, “cuando entramos como cuadrantes lo primero que nos dijeron: no queremos falsedades, si usted nada más tiene dos gentes, nada más dos gentes anota”.

Del Mazo, quien hoy vistió pantalón de mezclilla y sintió los sudorosos abrazos de los sureños, baja la ventanilla de su camioneta y se despide con el brazo. 

Doña Susana sigue hablando.

“A nosotros nos dan bien poquito, 500 pesos, por cada 15 días”, indica, pero a los coordinadores les dan 6 mil. No importa. “Somos priistas de corazón”, señala, mientras los tamborazos aún se escuchan en el interior del palenque.

De Morena mejor ni hablar, “ya la tumbaron feo”, asegura.

En esta zona serrana no impactan las encuestas que advierten la posible caída del grupo priista, que desde el siglo pasado gobierna al Estado de México.

“Para el sur el único gallo es Del Mazo”, afirma Guillermina Casique, secretaria de acción agraria de la CNC y exdiputada local del PRI. Pero “ahora soy una militante más” del sur mexiquense, aclara.

Casique está formada en línea para despedir a su candidato, a quien adelanta, le darán muchos votos, pues el sur podría marcar la diferencia en los comicios del 4 de junio.

“Allá (en la zona conurbada) podrá empatar, pero aquí le vamos a dar para que gane”, presume.

“El PRI nos ha dado mucho, tenemos hospitales, con problemas, pero los tenemos, tenemos escuelas, universidades, apoyo al campo, becas todo, nos hace falta sí, pero gracias al PRI hemos tenido todo en el sur”, afirma.

El palenque está quedándose vació, los gallos se han ido, pero en el interior y exterior los jóvenes con playeras rojas y rosas continúan recogiendo demandas de materiales de construcción e inscribiendo a las mujeres a un supuesto padrón de beneficiarias del salario rosa anunciado por Del Mazo. En tierra caliente las estructuras se mueven y los cuadrantes trabajan de corazón.