A unas horas de concluir la primera elección por voto popular de jueces, magistrados y ministros del Poder Judicial de la Federación (PJF), la cual forma parte de la reforma impulsada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, distintas voces de la oposición se hicieron presentes tanto en las urnas como en las calles, en una jornada marcada por el escepticismo y la protesta.
Este domingo 1 de junio se celebró por primera vez en el país un proceso electoral para designar directamente a integrantes del PJF. A pesar de las críticas que ha generado la reforma, algunos políticos opositores decidieron participar.
Tal fue el caso de la gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos, quien, al acudir a emitir su sufragio, expresó: “No creas que me hace muy feliz” la reforma judicial. No obstante, llamó a la ciudadanía a no quedarse con “los brazos cruzados” y a ejercer su derecho al voto, aunque reconoció que la baja participación responde a la falta de credibilidad en el nuevo modelo.
En Querétaro, el gobernador Mauricio Kuri también acudió a votar. Aunque reiteró su desacuerdo con el mecanismo de elección, sostuvo: “Sí, voté por candidatos, los que yo pensaba que eran la mejor opción, independientemente de que estaba yo en desacuerdo de la nueva forma que se va a hacer el Poder Judicial”.
Desde Sonora, el senador Manlio Fabio Beltrones defendió su decisión de acudir a las urnas, sin embargo, a través de sus redes sociales, señaló la baja afluencia y lo prolongado del proceso, al recibir una decena de boletas.
Añadió: “Voté por aquellos que conozco que pueden hacer un buen papel como juzgadores y evité votar por aquellos que no conozco, ni sé dé su trayectoria”. También advirtió que este tipo de decisiones no deben quedar a merced de “la conveniencia, popularidad o discrecionalidad de los intereses del poder en turno”.
Mientras tanto, en la Ciudad de México, la inconformidad se hizo notar en las calles. Bajo el lema “Domingo Negro: el Despertar de la Ciudadanía”, cientos de personas marcharon en Paseo de la Reforma para rechazar lo que consideran un atentado contra la independencia judicial.
Vestidos de blanco y con moños negros, los manifestantes avanzaron desde el Ángel de la Independencia hasta el Monumento a la Revolución coreando consignas como “Sin Poder Judicial no hay libertad” y “¡La Corte no se toca!”.
Convocada por el colectivo México Unido y respaldada por organizaciones como Chalecos México A.C., Marea Rosa y Contrapeso Ciudadano, la movilización reunió a más de mil personas, según cifras de los organizadores. Entre los asistentes había trabajadores judiciales y estudiantes de derecho.
Durante la protesta, la organización Resistencia Civil Activa y Pacífica (RECAP) advirtió mediante un comunicado: “Entre las candidaturas hay contendientes con historial criminal o nexos con grupos delincuenciales, lo que implica un riesgo para la democracia”.
