Luego de que varias facultades y planteles de nivel medio superior suspendieron actividades presenciales como medida preventiva ante amenazas de violencia dirigidas a estudiantes y personal académico, la UNAM se comprometió a reforzar la seguridad de sus alumnos con ayuda de padres de familia.
A través de un comunicado, la Máxima Casa de Estudios del país indicó que el rector, Leonardo Lomelí Vanegas, se comprometió a hacer todo lo que esté a su alcance para garantizar a las y los estudiantes su seguridad, a fin de que regresen a las actividades presenciales.
Añadió que este retorno se dará de “manera ordenada, atendiendo todos los protocolos de seguridad y con la participación del cuerpo directivo de las facultades y escuelas”.
Destacó que las autoridades se mantendrán atentas a las recomendaciones que la Comisión Especial de Seguridad del Consejo Universitario realice para garantizar la integridad de la comunidad y brindar atención psicológica a quienes lo requieran.
El rector precisó que hay planteles, facultades, escuelas e institutos de la UNAM que tienen clases presenciales, algunos están con actividades en línea, otros se encuentran en paro por la conmemoración del caso de Ayotzinapa y del 2 de octubre de 1968, mientras otros más suspendieron actividades en solidaridad con el CCH Sur.
El rector expuso las líneas de acción que la UNAM está aplicando ante los casos de amenaza:
1. Informar y denunciar. Las facultades, escuelas, institutos y centros que han recibido o reciban amenazas informan de inmediato a la Secretaría de Prevención, Apoyo a la Movilidad y Seguridad Universitaria, la cual contacta a las autoridades de seguridad pública federales y locales, para que, de manera conjunta se hagan las revisiones necesarias. Asimismo, se informa a la Oficina del Abogado General responsable de levantar las denuncias correspondientes.
2.- Aplicar protocolos y acciones coordinadas con su Consejo Técnico. Las directoras o directores convocan al Consejo Técnico de la Facultad, Escuela, Instituto o Centro para que, en conjunto, se evalúe la conveniencia de que las actividades académicas se realicen temporalmente en línea, mientras se revisan los protocolos y presentan las denuncias correspondientes.
3.- Definir con su órgano colegiado los pasos a seguir. Las directoras y directores determinarán con su Consejo Técnico y la comisión local de seguridad el regreso a clases presenciales una vez que se han verificado las condiciones de seguridad del plantel.
Además, señaló que se estarán realizando las siguientes acciones:
- Incluir y escuchar a la comunidad. Las directoras o directores convocarán a sus comisiones locales de seguridad para que, en caso de ser necesario, se impulsen cambios que fortalezcan las condiciones de seguridad del plantel, los protocolos de actuación y se definan mejoras que sean pertinentes, consultando a su vez a la comunidad de cada Facultad o Escuela para que compartan sus propuestas.
- Reforzar las medidas de seguridad. Se reforzará el monitoreo permanente siempre con un enfoque de derechos, así como los patrullajes, incorporando en el caso del bachillerato a los padres de familia que de manera voluntaria se han ofrecido a colaborar y acompañar este proceso.
- Se fortalecerán los programas de atención psicológica y emocional. Con el propósito de atender a un mayor número de personas y de ofrecer un seguimiento más puntual a quienes así lo requieran, la Universidad fortalecerá y ampliará de inmediato su programa de apoyo emocional y se coordinará con el gobierno federal y los gobiernos de la Ciudad de México, así como de los estados.
- Se llevarán a cabo las medidas adicionales para retornar a la normalidad, como cursos, talleres, conferencias, actividades culturales y deportivas y todas aquellas que contribuyan a fortalecer nuestro tejido comunitario.
El rector Leonardo Lomelí enfatizó que la UNAM no es la única universidad en el mundo que ha recibido amenazas en los últimos meses. Aunque normalmente son falsas, generan zozobra, y hay que tomarlas en serio.
Indicó que se han tomado medidas para reanudar las actividades presenciales a la brevedad, que ha habido personas que se retractaron de su acción realizada en redes sociales, lo que se tomará en consideración y se procederá legal y disciplinariamente contra quienes han sembrado la inquietud en planteles.
Agregó que se cuenta con el apoyo de la policía cibernética, de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX.
Por su parte, la secretaria General, Patricia Dávila Aranda informó que el rector Lomelí ha impulsado el programa de apoyo emocional ESPORA en el bachillerato, con más de 90 psicoterapeutas y que en este año han atendido a más de cinco mil alumnas y alumnos. Esta estrategia se ampliará, agregó.