El primer trofeo del Mundial de Clubes está en poder de Donald Trump. El presidente de los Estados Unidos así lo aseguró, después de ser protagonista en la ceremonia de premiación del domingo tras la final entre el Chelsea y PSG, con los ingleses vencedores por goleada 3-0 en el partido celebrado en el MetLife Stadium de Nueva Jersey.
Al mandatario estadounidense ya se le había criticado por su exceso de protagonismo en la entrega del trofeo, quedándose en medio del estrado cuando los jugadores del Chelsea querían levantar el premio máximo.
Ahora, a esa polémica se suma que el propio Trump aseguró que Gianni Infantino, presidente de la FIFA, le hizo el espectacular regalo desde hace tiempo en la Casa Blanca.
Fue en marzo pasado que el jerarca de la FIFA visitó a su buen amigo en la residencia presidencial de Washington DC y, a decir de Donald Trump, el trofeo que él mismo entregó el domingo es una réplica porque el original se quedó en su despacho.
“Me dijeron: ‘¿Podrías guardar este trofeo un tiempo?’ Lo pusimos en el Despacho Oval’. Después, pregunté que cuándo iban a recoger el trofeo’. La respuesta fue: ‘No vamos a recogerlo. Puedes dejarlo para siempre en el Despacho Oval. Haremos uno nuevo’”, contó Trump.
“Y de hecho hicieron uno nuevo. Eso fue muy interesante. Ahora mismo (el trofeo original) está en el Despacho Oval”, añadió sin pudor alguno el polémico mandatario.