¿Cuántas veces hemos escuchado: "Si tienes 30 y aún vives con tus papás, no estás triunfando"?
Esto puede no ser así, pues en los últimos años se ha romantizado la idea de independizarse, lo cual implica que gastos pago de renta, comida, mobiliario y servicios... o algunos otros que no se tenían contemplados.
Por ello, Fernando Soto-Hay Pintado, fundador y director general de Tu Hipoteca Fácil, recomienda no independizarse de casa de tus padres hasta después de los 30, pues: "independizarte pareciera una forma de liberarte de las limitaciones que vives en su casa, pero mudarte hará que tengas nuevas limitaciones que no solo son financieras”, indica , empresa con 21 años de experiencia en asesoría patrimonial hipotecaria".
Explicó que cuando los jóvenes salen de casa no contemplan los costos extra y generalmente viven el límite con sus salarios: "Esta reducción de su poder adquisitivo sumado a la inflación, el alza de precios en la vivienda tanto en venta como en renta y la escasez de construcción de la misma afectan de manera considerable la forma en que los jóvenes buscan y pueden obtener su propio espacio de manera financieramente viable".
Según datos del Inegi, de las 35.2 millones de viviendas que existen en México, 5.8 millones son rentadas. Para que más Millennials y Gen Z no regresen al nido con una sensación de derrota con una enorme frustración y pérdidas financieras importantes, Soto-Hay sugiere reflexionar lo siguiente:
• Vivir en casa de tus papás te va a permitir ahorrar significativamente más que viviendo solo o con roomies; así podrás comprar tu primer casa o departamento, en lugar de rentarlo.
• Vivir con tus papás en tus 20 o incluso en tus 30 es muy enriquecedor, en todos sentidos, ya que te permitirá ahorrar una cantidad importante para eventualmente poder dar un buen enganche y comprar tu primera casa o departamento antes de lo que piensas.
“Los chavos de hoy no deben ‘independizarse’, si lo que buscan es formar patrimonio. El momento adecuado para dejar la casa de tus papás llegará cuando tengas la disciplina del ahorro y hayas juntado, por lo menos, 20% del enganche más los gastos de escrituración para tu primera casa o departamento.
De ese modo, tendrás una solidez financiera importante y entonces sí, la independencia te generará todas las satisfacciones que buscas. La independencia no se obtiene cuando comienzas a gastar en cosas que no te generan valor”, detalla Soto-Hay.
Para visualizar la ventaja de planear las finanzas con el fin de formar un patrimonio propio y no sólo salir de casa con muchas ilusiones pero poca planeación económica, Soto-Hay ilustra un caso real de éxito de la compra de un primer departamento por parte de una Millennial.
En este ejemplo, Fernando Soto-Hay Pintado, explica que con estos ingresos, esta compradora tenía la posibilidad de obtener un crédito hipotecario de un millón de pesos a 15 años o un millón 100 mil pesos a 20 años pagando entre $11,000 y $12,000 pesos mensuales.
Como el departamento que quería esta chica valía más del monto de crédito hipotecario al que tenía acceso, ella tuvo que poner en práctica un plan de ahorro que implicó quedarse a vivir con sus papás tres años más y hacer lo siguiente para poder comprar su primer departamento en el rango de precio que deseaba:
1) Pagó la mayoría de sus deudas
2) Aplicó un plan riguroso de ahorro de tres años donde ahorro al menos el 30% de su ingreso bruto mensual
3) Invirtió esos ahorros en instrumentos formales, así logró ahorrar el enganche y los gastos de escrituración de su primer departamento.
"El sueldo de esta chica millennial no aumentó en todo ese tiempo, pero al término del plan de ahorro, contaba con 1.1 millones de crédito hipotecario autorizado, 400 mil pesos para el enganche y 97 mil pesos para los gastos de escrituración (más o menos el 8% del valor de la propiedad) y otros gastos relacionados con su compra. De esta forma, ella pudo comprar su primer departamento de acuerdo a sus deseos, sin endeudarse de más", detalla.
Agregó que su surgencia concreta es vivir en casa de tus papás y ahorra todo lo que puedas: "si estás enfocado en eso, ellos sin duda te van a apoyar. No te angusties pensando que debes salirte a rentar porque ya estás en tus 20 altos o 30 bajos. Si rentas, seguramente serás capaz de comprar tu primera casa o depa pero te tomará mucho más tiempo".
Afirmó que probablemente el primer departamento adquirido no va a ser el departamento de tus sueños, pero sí uno que te dará grandes satisfacciones y, sobre todo, la base de un proceso muy satisfactorio de formación de patrimonio: "Si compras tu primer departamento con el crédito hipotecario adecuado, en ocho años lo vas a poder vender para comprar uno más grande, más cerca y más bonito. A este proceso lo llamo ‘la escalera de la vivienda’. Todo a su debido tiempo, pero dando pasos firmes”, finaliza Fernando Soto-Hay.
