Jorge Zarza y sus vivencias en El lugar de los Hechos

Jorge Zarza transmitiendo desde un hotel, a su espalda la estación Atocha
Jorge Zarza transmitiendo desde un hotel, a su espalda la estación Atocha
En Madrid, España.Jorge Zarza transmitiendo desde un hotel, a su espalda la estación Atocha
Especial
Nación321
2022-03-16 |12:43 Hrs.Actualización12:43 Hrs.

Se autodefine como un gran observador de la vida cotidiana, trabajador, muy agradecido con la vida y la empresa que le ha dado la oportunidad de contar e informar acontecimientos relevantes a nivel nacional e internacional.

"En el lugar de los Hechos", es el escaparate donde el periodista Jorge Zarza comparte 17 (de muchas más) historias de su trabajo realizado durante más de 25 años de labor periodística.

Zarza, casado y con tres hijos, asegura que nunca planeó ser periodista; sin embargo su poco gusto a las matemáticas lo llevaron a decidirse por inscribirse en la escuela Carlos Septién.

"En tercero de prepa que me vi obligado a escoger la carrera; una amiga me lleva un tríptico de la escuela de periodismo Carlos Septién García, vi las materias, asignaturas y dije esto es lo mío, no trae matemáticas, y por eso decidí estudiar periodismo", comparte el conductor de TV Azteca

Recuerda que sus padres muy cariñosos, pero tajantes, le dijeron que dejaría su natal Cuernavaca, Morelos, para regresar con la carrera terminada.

"Prácticamente me empujaron a la puerta, lo digo con cariño, porque luego los papás son muy consentidores, somos demasiados protectores, no lo fueron mis padres y lo celebro".

El titular de Hechos Domingo comparte que la única referencia que tenía que ver con el periodismo fue que en un cumpleaños se disfrazó de Jacobo Zabludovsky.

"Mi papá me hizo unos audífonos de unicel. Me puse un saco de mi primera comunión, mi papá me prestó una corbata, y me acuerdo que empecé a leer las noticias delante de los niños, ese pasaje lo tengo muy presente, tendría 8 o 9 años. Es una persona que yo admiro mucho y nunca tuve la oportunidad de conocer", dice.

Aunque Zarza tiene una gran trayectoria en TV Azteca, recuerda que sus inicios fueron en El Heraldo de México, como corrector de estilo; sin embargo, a los meses lo despidieron.

"Cuando cumplo 18 años, un compañerito me dijo 'mi zarza cuando tienes 18 años, sino das no quites' en referencia a lo que la familia me daba. Ese día me salí a buscar trabajo, agarre el periódico, y vi un letrero que decía que se solicitaba corrector de estilo en el Heraldo de México, no tenia ni idea lo que significaba eso. Fui y me hicieron un examen y me quedé, pero el turno era dramático, entraba a las 8 de la noche y salía a las 3 de la mañana, me iba todo desvelado a la Septién.

"A los 8 meses me corrieron por que obviamente no dimensioné lo que era un trabajo, lo que es la disciplina, lo que es llegar temprano, que no se te vayan los errores, recuerdo que el director me tachaba con color rojo todas las faltas que se me habían ido, como es posible si para eso te contratamos", recuerda en risas.

Después trabajó en Radio Mil, con el apoyo del que fuera su maestro, Martín Espinoza, meses después con el periodista José Antonio Pérez Stuart, y le siguieron Televisa y TV Azteca, donde permanece desde hace más de 26 años.

Zarza asegura que la televisora del Ajusco le ha dado la oportunidad de vivir de primera mano grandes acontecimientos, y por esa razón decidió escribir el libro En el lugar de los Hechos, donde busca que los lectores vivan algunas de sus coberturas.

"Estoy muy contento de trabajar en una empresa que desde un principio marco y fue un pilar y un constructor de la democracia del país, el primero que le puso un micrófono a Cuauhtémoc Cárdenas, y el primero que entró a la selva y y le puso un micrófono a Marcos. Fue Azteca quien propició los diálogos, los debates, eso no se tiene que olvidar, yo estoy enamorado de esa empresa, que pudo hacer un cambio político, social en mi país… tan contento me siento que el prologo del libro lo escribe Ricardo Salinas Pliego", comenta.

Cuenta que espera que su libro sea un "testamento" para las nuevas generaciones, no tanto para saber qué hacer, sino para saber que no hacer.

Apertura periodística

Para Zarza, actualmente existe una apertura periodística, considera que son tiempos distintos.

"Siento que sí ha habido una apertura, eso es innegable, lo que hoy se puede decir, lo que hoy se puede escribir, lo que se puede publicar, lo que se puede dibujar, no tiene nada que ver con lo que sucedía hace 15 años, 20 o 30 años; quien niegue que ha habido una libertad mucho mayor, mucho más amplia para los medios de comunicación, creo que puede equivocarse", opina.

Aunque el periodista admite que es una profesión de alto riesgo, como muchas, que le puede arrebatar la vida a una persona que está en el lugar de los hechos.

"Ser reportero en Veracruz, en la sierra de de Guerrero hay que tener valor, y en la CDMX también, las balaceras, están en las esquinas; es una tristeza que haya un desdén hacia el oficio, nunca lo había visto", concluye el comunicador.