A pesar de que ha pasado cerca de una semana del fallecimiento de Elena Larrea, la famosa activista por los derechos de los animales y fundadora de Cuacolandia, los detalles sobre cómo ocurrió su muerte siguen surgiendo.
En esta ocasión ha sido Azul Oliva, una de las amigas cercanas de la también modelo, quien decidió compartir cómo fueron las últimas horas que Elena pasó con vida, ya que busca desmentir los rumores sobre un presunto asesinato.
Esto debido a que la joven de 31 años se dedicaba a hacer el rescate de caballos que habían vivido situaciones de abuso y maltrato, lo que provocaba que ella fuera blanco de amenazas por parte de los propietarios de los equinos.
¿Elena presentó síntomas del padecimiento?
En su video, la joven comentó que con esta explicación buscaba desmentir todas las teorías de asesinato y relató que Elena comenzó a presentar síntomas desde el 8 de marzo, ya que su pierna empezó a dolerle.
No obstante, la activista era una mujer sumamente fuerte y dejó pasar el dolor e incluso continuó creando contenido para todas las personas que la siguen en redes sociales como si todo estuviera bien.
Además de ello, estaba pasando momentos personales muy complicados que se sumaban al estrés de los rescates de los equinos, tal como el del Mila, la última potra que logró salvar de la serie de maltratos y abuso sexual que cometía su dueño contra el ejemplar.
“Lo tomó muy a la ligera, como cuando uno dice ‘tengo gripa y se me va a pasar’”, compartió la joven en el video. Cuando Elena finalmente decidió tratarse, acudió a fisioterapia, ya que pensó que el problema era con los ligamentos.
No obstante, fue en ese momento que le explicaron que el verdadero problema estaba en sus arterias, ya que una de ellas se encontraba tapada. Tras ello fue al médico, pero ya no solo era un coágulo había desarrollado tres más.
Este fue el último mensaje de Elena Larrea
Ante esta situación, los médicos le recetaron medicamento y le permitieron ir a su hogar, por lo que Elena permaneció en reposo e incluso envió a su chofer a comprar el medicamento y pidió comida a domicilio.
Cuando sus alimentos llegaron, la mujer que le ayudaba con las tareas del hogar tocó a su puerta, pero Elena no respondió, por lo que decidió entrar y encontró a la activista inconsciente en su cama, con su celular a un lado.
Elena se había quitado casi completamente la faja postoperatoria que debía usar y le había enviado un último mensaje a su madre: “Mamá, no puedo respirar”, poco antes le contó que no se sentía bien de salud.
A pesar de que llevaron a Elena al hospital más cercano e intentaron darle respiración boca a boca mientras llegaban a la clínica, la activista falleció poco después de arribar al hospital.
Azul aseguró que es muy triste perder a una mujer tan fuerte y que contribuyó demasiado al bienestar de los equinos, no obstante, pidió dejar descansar a Elena Larrea y no inventar más rumores falsos sobre su muerte.
