De lo gigante a lo triangular: Alternativas a los tamales 'de verde' y dulce

La masa, las salsas y las hojas son elementos mexicanos
La masa, las salsas y las hojas son elementos mexicanos
Carácter nacional.La masa, las salsas y las hojas son elementos mexicanos
Especial
Enrique Vega
2024-01-30 |16:07 Hrs.Actualización16:06 Hrs.

¿Te salió 'muñequito' en la rosca? En Nación321 tenemos algunas recomendaciones para que sorprendas a tus invitados con tamales poco comunes, pero igualmente deliciosos que se comen en diferentes zonas de la República Mexicana y que pueden hacerte 'el paro' este 2 de febrero. 

1.- Tamales de ollita:

Provenientes desde las verdes y frías tierras de Ocoyoacac, en el Estado de México, este delicioso platillo se extrae del maíz nixtamalizado. Pero... ¿por qué de 'ollita'? Bueno, en realidad este tamal adquiere su nombre por su forma. 

A diferencia de los tamales que consumimos regularmente en la Ciudad de México, el tamal de ollita tiene la peculiaridad de que es hueco al interior, pero... no están vacíos, pues la 'caverna' que se forma al interior está rellena por abundante salsa verde y carne de pollo o de cerdo. Es común que estos tamales sean consumidos por las mañanas en Ocoyoacac y alrededores, acompañados de un cafecito o un champurrado. 

2.- Zacahuil

En una de las regiones del país más ricas tanto en términos naturales como en gastronomía, nace un tamal que no es 'común', pues es uno de los platillos más grandes de la República...  el tamal de mayores dimensiones que conoce la cocina mexicana. 

Nos referimos, por su puesto, a la huasteca (San Luis Potosí, Veracruz e Hidalgo), donde es tradición comer el exquisito zacahuil, un tamal que sólo por sus dimensiones llama a atención, pues con uno de ellos es suficiente para alimentar... a toda la cuadra, pues algunos llegan a pesar hasta 50 kilos, y medir hasta metro y medio de largo.

Elaborado con masa de maíz martajado y molido con chile, este impresionante 'monstruo' de la gastronomía mexicana regularmente se rellena de carne de pollo y res, y se envuelve en hoja de plátano o papatla y es cocido en horno bajo tierra. Un auténtico gigante de la huasteca.

Pero no sólo es el tamal más grande del país. Aunque actualmente se usa carne de res y cerdo para su preparación, se dice que antes, en la época prehispánica, este tamal se realizaba con carne de españoles que violaban a mujeres hustecas, esto como forma de hacer justicia a las vejaciones que padecían las mujeres de la región. Historia pura.

3.- Mukbil de pollo:

Desde la región del sur llega un poderoso tamal con espíritu maya: el mukbil de pollo. Un exquisito tamal tradicional en la zona peninsular del país. 

En este ejemplo de tamal tenemos que ir primero a sus orígenes: se compone de 'Muk': enterrar, sepultar; 'Bil': torcer, revolver, por lo que juntos significa que "ha sido o que debe ser enterrado".

Este delicioso tamal se hace con masa de maíz nixtamalizado, manteca, carne de cerdo y pollo, condimentos y sal, envuelto en hoja de plátano y cocido lentamente bajo la tierra desde una noche antes. Sí, toda una artesanía maya. 

4.- Corunda

Porque Michoacán y la cultura purépecha no se podían quedar fuera de este exquisito listado: llegan las corundas. Que no te engañe el nombre ni su aspecto, pues también es un tamal. 

Las corundas son un tamal hecho con una masa de maíz blanca, mezclada y batida con manteca de cerdo, leche o agua y sal, la cual se envuelve en hojas de caña de maíz. 

Lo que las hace tan especiales es su forma triangular, que se logra cuando se pone un poco de masa en el extremo de la hoja, que se cubre poco a poco y se enrolla hasta conseguir esta forma particular, aunque las más tradicionales llegan a tener seis lados y cinco puntas. 

Este platillo suele consumirse bañadas con bastante salsa verde o roja, queso cotija o añejo y, a veces, crema y rajas de chile poblano o chilaca; a esta forma de prepararlas se le llama atapakua khurhúnda, que en purépecha significa corundas preparadas en salsa o mole.

Ya no tienes pretexto para pagar los tamales y hacerlo de una forma muy original. ¡Provecho!