La Real Academia Española (RAE) presentó una nueva actualización del Diccionario de la Lengua Española (DLE), en su versión digital 23.8.1, que incorpora más de 300 novedades entre palabras nuevas, ajustes y ampliaciones de acepciones, como parte de un adelanto de la próxima edición impresa prevista para 2026.
La presentación se realizó en la sede de la RAE y estuvo encabezada por su director, Santiago Muñoz Machado, quien explicó que el idioma atraviesa una etapa de cambios acelerados, impulsados en buena medida por la tecnología. En ese contexto, señaló que el diccionario debe reflejar el uso real del español y atender la llamada “revolución de las palabras” que se vive en la actualidad.
Entre las incorporaciones que más destacan se encuentran términos del entorno digital que ya forman parte del habla cotidiana, como streaming, hashtag, gif y loguearse. Algunos de ellos se mantienen como extranjerismos, mientras que otros han sido adaptados a la ortografía del español, de acuerdo con los criterios académicos.
Elena Zamora, responsable del Instituto de Lexicografía, detalló que el ámbito digital es uno de los que más novedades aporta al diccionario, aunque subrayó que la actualización no se limita a internet. También se sumaron términos procedentes de la ciencia, la medicina, la cultura y la vida diaria.
En el plano social y cultural, el DLE incorpora palabras como turismofobia, vinculada al rechazo al turismo masivo en algunas ciudades; microteatro, para referirse a obras escénicas de corta duración; así como expresiones coloquiales que han ganado presencia en distintos países, entre ellas bocachancla, simpa y farlopa. También se añadieron términos relacionados con estilos de vida y alimentación, como crudivorismo, crudismo y crudívoro.
Muñoz Machado subrayó que ninguna palabra se integra al diccionario por decisión arbitraria. Cada incorporación pasa por un proceso de análisis que incluye estudios lingüísticos, evaluaciones internas y consultas con las academias de la lengua en América, además de propuestas que llegan tanto de instituciones como de los propios hablantes.
Con esta actualización, la RAE busca que el Diccionario de la Lengua Española continúe siendo una obra de referencia que dé cuenta de cómo evoluciona el idioma y de cómo se habla el español en la actualidad, incorporando nuevas realidades sin perder el rigor académico.



