Prácticamente como un milagro, fue aplaudida la alta médica de Kevin Díaz Monte de Oca, un joven de 19 años de edad que logró sobrevivir a la explosión, ocurrida semanas atrás, de una pipa de gas LP en el Puente de la Concordia, en Iztapalapa, Ciudad de México.
Entre aplausos y porras de los trabajadores del hospital Pemex Picacho, así como de su familia, Kevin fue dado de alta, tras 27 días hospitalizado.
Su historia es única, pues pese a las quemaduras, el pasado 10 de septiembre, día de la explosión, Kevin alcanzó a relatar a su madre, María Coral Montes de Oca, lo que estaba ocurriendo, mediante un audio de WhatsApp:
“Mamá, ayúdame. Chocaron. Explotó algo. ¡Estoy todo quemado. Estoy todo quemado, mamá!“, fue el audio que envió.
Y el mensaje continuó: “estamos aquí por los puentes de Santa Marta. Los amo mucho familia. Con mucho cuidado, cuídense mucho”, dijo.
Así, este martes 7 de octubre, el joven salió del hospital acompañado de su madre Coral y fue recibido por su esposa y su hijo de nueve meses, donde medios de comunicación como Milenio pudieron entrevistarlo.
“Fue difícil, pero tuve mis motivaciones (...) Tengo que estar en casa, tengo que dejar que las manos y la cara terminen de hacer su trabajo, que se hagan de nuevo”, dijo Kevin, al convertirse en el paciente 42 en ser dado de alta tras la tragedia.