La polémica contaminación de agua potable en la alcaldía Benito Juárez se derivó del contacto del líquido con aceite degradado, confirmaron autoridades de la Ciudad de México.
En su comparecencia en el Congreso local, Myriam Urzúa, titular de Protección Civil capitalina, indicó que tras varios estudios de muestras recolectadas, se concluyó que el agua estaba contaminada con aceite degradado proveniente del Pozo Alfonso XIII.
Indicó que dicho aceite provenía de empresas que se establecieron en la zona hace más de 40 años, pero que actualmente no se produce ese tipo de sustancia.
Fue a finales de marzo del año pasado que habitantes de 80 colonias de la alcaldía Benito Juárez reportaron “olor a gasolina” en el agua que les llegaba a sus casas, lo que ocasionó una fuerte movilización en la demarcación.
Ese mismo año, autoridades capitalinas indicaron que se trataba de diésel degradado, por lo que el pozo fue clausurado y autoridades descartaron que el agua contaminada estuviera en el acuífero principal.



